España se queda al margen de la incipiente recuperación
El PIB de nuestro país cae un 0,9%, al tiempo que acumulamos un tercio de todos los parados de la zona euro
Las estadísticas europeas confirman cada mes la mala marcha de la economía española. Ayer pusieron de manifiesto la incipiente recuperación que empieza a experimentar el Viejo Continente, aunque nuestro país no parace que vaya a ser invitado a la fiesta. Si Francia y Alemania crecen ... ya al 0,3%, España mantiene el registro negativo, que en el segundo trimestre habría sido del -0,9 según el Banco de España.
A los malos datos de crecimiento se unen los del paro, capítulo en el que España es una verdadera campeona. Las últimas estadísticas europeas reiteran que seguimos con la tasa de paro más elevada de toda la UE, nada menos que el 18,1% de la población activa, frente al 8,9% que tuvieron de media los países de la Eurozona, es decir, más del doble. Este 8,9% de paro de la Eurozona es la tasa más elevada desde junio de 2009.
En términos absolutos, en España hay 4,4 millones de parados, frente a un total de la Eurozona de 14,8 millones registrados en junio, lo que supone que nuestro país tiene el 30% de todos los parados de los países del euro.
Estabilización de mercados
Sin embargo, la recuperación empieza a llamar a las puertas de Europa. El ultimo informe trimestral sobre la situación de la economía europea realizado por la Comisión Europea ya pone de manifiesto esta tendencia, que se está reflejando en una estabilización de los mercados financieros fruto de la menor aversión al riesgo de los inversores. Han mejorado también las condiciones de financiación fruto de la disminución de las condiciones de los préstamos bancarios, de los de capitales y de los de deuda. A pesar de lo anterior Bruselas destaca que el crecimiento de la masa monetaria así como del crédito se ha ralentizado por la atonía de la actividad.
Entre los datos positivos aparece que la confianza en la marcha de la economía, medida cada mes por el Ejecutivo comunitario a través del Indice de Clima Empresarial, creció ligeramente en junio aunque se sigue manteniendo por debajo de su anterior mínimo, alcanzado en 1993. Esta mejora, según Bruselas, se debe a la ligera mejora de las expectativas de los empresarios. Al mismo tiempo se empiezan a atisbar ligeras mejoras en la actividad del comercio a nivel mundial, aunque se mantiene débil.
En el caso de la confianza de los consumidores europeos las encuestas también arrojan ligeras mejoras en los dos últimos meses, aunque frente a los aumentos de 3,2 puntos registrados en este índice en Francia y Alemania la subida en España ha sido de tan sólo 2 enteros.
La producción industrial es otro indicador que muestran un cambio de tendencia, de la que por el momento España se queda también al margen. En mayo este indicador subió un 0,5% en la Eurozona, fruto del tirón registrado en Alemania (3,7%) y en Francia (2,6%). España tuvo un descenso del 2,9%.
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