Dia cambia su estructura y nombra a Faustino Domínguez director ejecutivo en España

Además, el director financiero Amando Sánchez Falcón fue suspendido de empleo y sueldo durante un mes. Según han informado fuentes cercanas a la compañía a este periódico, los días del exdirectivo de Abengoa como director ejecutivo pueden llegar a su fin próximamente.

En cualquier caso, los movimientos por parte de Mikhail Fridman, máximo accionista de Dia, no se han hecho esperar. El magnate ruso ha acometido una serie de cambios en su estructura organizativa, que pueden entenderse como un paso previo a la purga de la cúpula de los últimos meses.

Así, el más significativo es el nombramiento de Faustino Domínguez como director ejecutivo del grupo en España, un puesto que ya asumió en Portugal desde el 2014 hasta el 2017, fecha en la que se incorporó al Comité de Dirección del Grupo DIA como director ejecutivo de la enseña de la compañía en España. De esta manera, en esta nueva dirección se unificará las áreas comerciales y de operaciones de todas las enseñas.

Por otro lado, la cadena también va a acometer la creación de un departamento llamado «secretaría corporativa», donde estará al frente Miguel Ángel Iglesias, actual director jurídico y compliance del grupo. Estará encargado, entre otras cosas, del control financiero, de la seguridad de activos y de la seguridad de la información y seguros.

Por último, la cadena crea una «dirección ejecutiva de recursos humanos», que estará liderada por Alejandro Grande, según ha informado la compañía. Grande es actualmente director ejecutivo de Dia en Argentina, cargo en el que seguirá al frente hasta que se nombre un sucesor. El nuevo director ejecutivo de recursos humanos se integrará también en el comité de dirección del grupo.

En el día de hoy, la cadena no ha mejorado sus resultados bursátiles. A pesar de que en la apertura los títulos tuvieron unas subidas de en torno al 6%, al cierre del mercado se ha anotado nuevas pérdidas de dobles dígitos, en este caso del 15%. El valor de los títulos se encuentra en los 0,850 euros mientras que la capitalización total de la compañía se sitúa ya en los 529 millones de euros, muy lejos del máximo de 5.000 millones logrado en 2015.

El valor de los títulos de Dia es otra de las claves de esta crisis empresarial. Y es que el mercado espera que el máximo accionista de la empresa, el fondo Letterone, haga algún movimiento, ya sea accionarial o de intenciones, para calmar la situación de grave inestabilidad que vive la compañía.

El fondo es propiedad del magnate ruso Mikhail Fridman y cuenta con el 29% de las acciones de Dia , justo por debajo del límite legal del 30% que la ley de ofertas públicas de adquisición (opas) fija como obligatorio para presentar una oferta por la totalidad. La caída del precio de los títulos y la complicada situación que atraviesa la compañía centran en él todas las miradas.

No obstante, según la legislación, una sociedad no puede lanzar una oferta por un valor inferior a una compra efectuada en esa misma empresa en los 12 meses anteriores. Y Letterone entró en Dia el pasado enero, cuando los títulos cotizaban en torno a 4 euros, por lo que lo lógico es que espere a principios de 2019 para hacer cualquier oferta y aprovechar así la caída del valor.

Como fuere, la crisis vivida en la cadena, que cuenta con 7.400 tiendas en España, Portugal, Argentina y Brasil, ha sido aprovechada por Fridman para ir moviendo sus fichas. El mismo lunes se confirmó también la ya anunciada salida de Ana María Llopis como presidenta de Dia. Llopis fue relevada provisionalmente por Stephan DuCharme, hombre de máxima confianza de Fridman y que también ocupará el cargo de vicepresidente.