La Europa de los tecnócratas no logra evitar el contagio a España y Francia
Las primas de riesgo de los dos países se instalan en máximos desde la llegada del euro
m. núñez
A pesar de que el pasado fin de semana hubo cambios muy significativos en los Gobiernos de Italia y Grecia, los mercados siguen sin fiarse y decidieron ampliar su radio de acción a España y Francia.
En el caso de la deuda pública española, ... la prima de riesgo fue una de las más castigadas ya que los inversores exigieron un interés por los bonos a 10 años del 6,032%, lo que supone que el diferencial con el bono alemán, que se toma como referencia de solvencia, escaló hasta la histórica cota de los 432 puntos básicos.
España, sobre la que planea la sombra de la recesión para finales de este año o principios de 2012, se ha convertido así de nuevo en el objetivo de los especuladores, en la siguiente «presa» a abatir tras la caída de Grecia, Irlanda y Portugal, y después de haberse mantenido a salvo durante las últimas semanas.
Mientras tanto, la deuda de Alemania continuó ayer bajando hasta quedar los bonos a 10 años en el 1,7% de interés , como consecuencia, entre otras cosas, de la fuerte demanda, lo que contribuyó también a ampliar el sobrecoste de los títulos españoles.
Al otro lado de los Pirineos, en Francia, también había ayer mucha preocupación por la evolución de su mercado de deuda, ya que el diferencial con los bonos alemanes se situó en 162 puntos básicos, muy cerca por tanto de los 169 de máximo histórico que marcó la semana pasada.
En este contexto de renovada incertidumbre, pese a que dos tecnócratas se han hecho cargo de los Gobiernos de Italia (Mario Monti) y Grecia (Lukas Papadimos), tal y como se había «aconsejado» desde las instituciones europeas de una manera velada, la canciller alemana, Angela Merkel, aseguró ayer que «Europa vive sus horas más difíciles desde la Segunda Guerra Mundial» . Fue durante un acto dentro del congreso de su partido, la CDU, donde añadió que «ha llegado la hora de una nueva Europa ya que un fracaso del euro sería también de toda Europa».
Sin embargo, estas declaraciones, que otras veces han servido de bálsamo para los mercados, han pasado esta vez desapercibidas, ya que la deuda ha seguido subiendo y las bolsas bajando. En el caso del Ibex-35 el retroceso fue del 2,15%, un mal comienzo para una semana en la que el Tesoro español aspira a captar 7.500 millones de euros en el mercado en letras a 12 y 18 meses y bonos a 10 años.
Italia: bonos al 6,2%
La Bolsa de Milán reculó un 1,99%, después de que el mercado se decepcionara tras la colocación de bonos del Tesoro italiano a cinco años por importe de 3.000 millones de euros a un tipo de interés histórico del 6,29%, frente al 5,32% de la última operación de estas características, a mediados de octubre.
A pesar de que el Tesoro italiano consiguió en el mercado los fondos que tenía previsto, la prima de riesgo de la deuda de ese país alcanzó en la tarde de ayer los 492 puntos básicos, lo que supone que siguen sin disiparse las dudas de los inversores sobre la capacidad del nuevo Gobierno italiano , capitaneado por el ex comisario europeo Mario Monti, para reconducir la situación económica del país, que pasa necesariamente por aumentar los ingresos, reducir el gasto y hacer las reformas que tiene pendientes el país.
Y como muestra de la mala situación por la que atraviesa el país de la bota está Unicrédit, que anunció ayer que solo en el tercer trimestre tuvo unas pérdidas de 10.641 millones de euros debido a «depreciaciones» extraordinarias de activos, y anunció una ampliación de capital de 7.500 millones de euros. Los títulos de la entidad, tras estar suspendidos durante varias horas ayer en la Bolsa de Milán, cerraron con un descenso de un 6%.
Desde el lado bancario, el presidente de la Federación Bancaria Europea, Christian Clausen, defendió ayer que las entidades vendan los títulos de deuda italiana que tengan para intentar mantenerse al margen de la crisis de la deuda y cumplir con las nuevas exigencias de capital. Cabe recordar, además, que el regulador bancario europeo (EBA, en sus siglas en inglés) ha instado a las grandes entidades del Viejo Continente a recapitalizarse por importe de 106.000 millones de euros antes de junio de 2012 para cumplir con sus nuevas exigencias de capital.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete