La CNMV advierte del riesgo de productos financieros con una escala de colores
El organismo supervisor clasifica los instrumentos de ahorro en función de la posibilidad de sufrir pérdidas o no recuperar la inversión inicial y la solvencia del emisor de los títulos, entre otros criterios
La CNMV advierte del riesgo de productos financieros con una escala de colores
La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) quiere evitar nuevos escándalos como la comercialización irregular de participaciones preferentes que atrapó los ahorros de miles de particulares. Para ello, el supervisor bursátil ha elaborado un sistema de clasificación de los productos financieros dirigido a ... inversores minoristas y que catalogará los intrumentos de mayor a menor riesgo con un escala de colores de cinco niveles.
«El sistema, que se concreta en una sencilla escaka de colores con cinco niveles de riesgo, pretende mejorarla información que recibe el inversor antes de contratar un producto financiero, de manera que en un vistazo sea capaz de comprender el nivel de riesgo que va a asumir y la complejidad de los valores. De esta forma, se facilita además la comparabilidad entre productos alternativos», explica el organismo presidido por Elvira Rodríguez en un comunicado.
En concreto, la escala de colores va del verde (productos más sencillos y seguros) al rojo (los más complejos y de mayor riesgo). Además, se añadirán unos iconos (candados) para indicar la mayor o menor liquidez del instrumento. Los criterios que usará la CNMV para catalogar los productos de ahorro e inversión tienen en cuenta, entre otros, el riesgo de recuperación del dinero invertido al vencimiento del producto, la solvencia del emisor del producto o título, el plazo de vencimiento, las características del producto y la divisa en que está denominado. Después de aplicar esa guía, el producto será ordenado dentro de esa escala, con los correspondientes iconos en función de su liquidez y una breve descripción general del riesgo que conlleva.
En la línea de esta medida, incluida por la CNMV en su Plan de Actividades 2014, el supervisor reforzará las medidas de protección al inversor durante el proceso de venta de productos especialmente complejos y que no resultan adecuados para particulares, como el caso de los bonos contingentes convertibles («cocos», en el argot financiero), deuda estructurada y derivados, entre otros.
Cuando la adquisición de estos instrumentos se haga fuera del asesoramiento o la gestión discrecional e individualizada de carteras, las entidades tendrán que realizar al particular el siguiente aviso: «Advertencia de la CNMV: Esta operación se refiere a un instrumento financiero especialmente complejo. La CNMV considera no adecuada su adquisición por inversores no profesionales». De igual modo, el cliente tendrá que firmar esa advertencia y escribir, de su puño y letra: «Producto no adecuado para inversores no profesionales», de forma que conste que es consciente de los riesgos que asume.
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