El año de sequía de Muguruza

Atrás queda la imagen sonriente con el trofeo Suzanne Lenglen en sus manos . Se convirtió en la segunda española en ganar un Roland Garros, donde ya Arantxa Sánchez Vicario lo logró en 1989 con 17 años. Y, también, en la tercera mujer en sumar un grande al palmarés nacional ( Conchita Martínez ganó en Wimbledon en 1994).

El 4 de junio de 2016 quedó grabado en su memoria y, a día de hoy, sigue arrastrando la presión que le supone volver como actual campeona . Pese a la ausencia de Serena Williams , a la que ganó en la final, el camino de la española para revalidar el título no será nada fácil . Como tampoco han sido los torneos disputados por Muguruza durante este año.

Tras París, el pasado año perdió en Mallorca en primera ronda. Acusada, quizás, por el cansancio y el esfuerzo realizado durante el grande de tierra batida. Regresó a Wimbledon , donde había perdido en la final de 2015 precisamente frente a Serena Williams, pero su actuación fue corta al caer eliminada en segunda ronda .

Después vendrían los Juegos Olímpicos de Río , donde no pasó de octavos de final, derrotada claramente por Mónica Puig . Semifinales en Cincinnati y, de nuevo, volvió a perder en segunda ronda del último Grand Slam de la temporada, el US Open .

La gira asiática no fue mucho mejor para la hispanovenezolana: cuartos en Tokio ; segunda ronda en Wuhan ; octavos en el cuarto y último Premier Mandatory, Pekín , y cuartos también en Linz . El Masters de Singapur era la última oportunidad de Muguruza para cerrar una temporada regular, pero tampoco lo aprovechó. Perdió los dos primeros partidos y no superó la fase de grupos , la previa para poder disputar la semifinal. Aquí terminaba el curso para la tenista.

Año nuevo, misma sintonía en las pistas. Muguruza empezó la temporada en una línea idéntica a la anterior. Sin llegar a ninguna final. Pese a ello, logró estar entre las cuatro mejores en Brisbane , dando a entender que había vuelto el juego que la hizo ser reina en París . Quedó eliminada en cuartos en el Open de Australia , el primer grande.

Doha en octavos, Dubai en el primer partido, Indian Wells en cuartos y Miami en octavos. La actuación de la española en los dos primeros Mandatory no fue la deseada, ni la esperada. Cabe recordar que solo cuenta con uno en su palmarés: Pekín en 2015 . También perdería en octavos en el torneo de Stuttgart , primer partido que disputaba allí al llegar como una de las cabezas de serie.

Llegaba a España con la ilusión de romper su mala racha, de convertirse en la primera española en ganar en Madrid. Pero todo sueño se hizo añicos cuando la suiza Timea Bacsinszky la eliminó en el estreno. Perdía en casa , ante un público que la ánimo hasta el último punto, aun teniendo el marcador totalmente en contra. En Roma, el último Masters 1.000 antes de Roland Garros, la española tuvo que retirarse en semifinales por una molestia muscular en el cuello. Su nivel, eso sí, mejoró considerablemente.

A sus 23 años, con su estilo de juego agresivo y siendo número 5 en el ranking WTA , Muguruza llega para demostrar que París sigue siendo especial para ella. Su buena actuación en Roma, tras vencer a Jelena Ostapenko, Julia Georges y Venus Williams , dejó latente que peleará en la tierra de Roland Garros para volver a llevarse el trofeo a casa. Y defender, además, los 2.000 puntos que ganó la pasada temporada. En el primer partido tendrá enfrente a la número 76 del mundo, Francesca Schiavone .