Así es Maximilian Marterer

Oscurecido por la larga sombra que proyecta Alexander Zverev , Marterer se ha colado en octavos con mucho menos ruido que su compatriota, abonado a las remontadas y a los partidos de cinco mangas. «Así doy más espectáculo», se rió tras ganar a Karen Khachanov . El «otro alemán», natural de Nuremberg, fan de Roger Federer y seguidor del Hoffenheim, pulula por la posición 70 del ranking y asume su papel en este choque con el número 1 desigual en todos los ámbitos. Si Nadal ha ganado diez veces en París, Marterer llega a esta ronda por primera vez en su vida, en cualquier Grand Slam, pues solo se ha colado en el cuadro final tres veces: US Open 2017, Australia 2018 y hoy. Si Nadal cumplió ayer 32 años, Marterer cumplirá 23 la próxima semana. Si Nadal lleva desde 2001 como profesional en el circuito ATP, Marterer solo puede enorgullecerse de una semifinal en Múnich, torneo 250 . En una cosa se parecen: son zurdos. O en dos, el alemán también funciona con efectos.

El alemán ha tenido un despertar lento, y en el que tuvo que echar para atrás a principios del año pasado porque las catorce derrotas consecutivas en primeras rondas que sufrió alteraron su progresión y su confianza. Volvió al origen, a los torneos de menor entidad, para impulsarse sobre sus pasos. Y para tener en el propio Rafa Nadal un ejemplo. El balear lo eligió para ser su sparring varias veces en Roland Garros 2013 . El español apenas lo recuerda, aunque sí lo ha visto jugar. Para Marterer fue un gran día en su vida. Hoy tiene otro, en el segundo turno de la Philippe Chatrier (sobre las 13.00 horas, Eurosport) , para este alemán que esperó apoyado en una pared a que Maria Sharapova terminara su rueda de prensa. Hoy ya no esperará. Es su día.