Hacer hueco para traer un delantero

Se afana estos días el club por dar salida a esos jugadores que ya han escuchado de boca del entrenador que no contarán con muchos minutos si se quedan en el vestuario. El segundo en salir -lo hizo ya Jovic a la Fiorentina-, a falta solo de los detalles burocráticos, es el japonés Kubo, cuyo destino será la Real Sociedad que pagará por el 50 por ciento de sus derechos unos seis millones de euros. Se reserva el Madrid una opción de compra preferencial durante los próximos años y también un trozo del pastel de una futura venta. Marcha obligada por su condición de extracomunitario y no tanto por la falta de confianza del club en sus cualidades.

Es el mismo caso que el de Reinier, al que los blancos quieren ver en acción en un equipo de la Liga después de un curso perdido en Alemania, donde apenas jugó en el Borussia. Su destino podría estar en el Valladolid, club presidido por su compatriota Ronaldo Nazário, que está pujando fuerte por hacerse con sus servicios. Está previsto que el brasileño no viaje hoy con el resto de compañeros a la gira de Estados Unidos, donde Ancelotti solo quiere llevar a los que vayan a formar parte de la plantilla durante la temporada. Entre ellos podrían estar Vallejo, Odriozola, Mariano, Ceballos y Asensio, aunque todos ellos saben ya que si vienen con una oferta el club estaría dispuesto a escucharla.

Los dos defensas tienen por delante a muchos jugadores en su puesto. La llegada de Rudiger complica un poco más al central maño, que ya el año pasado resultó irrelevante para el técnico. Odriozola, por su parte, sería la tercera opción para el lateral derecho -por detrás de Carvajal y Lucas Vázquez-, lo que invita al vasco a salir para disfrutar con el fútbol como hizo la temporada pasada en la liga italiana.

El caso de Asensio es el más complicado de todos. El internacional dejó claro hace semanas que vería con buenos ojos una salida este verano, un año antes de que finalice su vinculación con el Real Madrid, pero el problema es que no cuenta con una oferta que satisfaga a las dos partes. Su buen cartel no ha estimulado a ningún club para realizar el desembolso que los blancos estarían dispuestos a aceptar, no menos de 30 millones. Ocurre parecido con Ceballos, al que también le queda un año de contrato y que tiene ofertas, pero ninguna tan jugosa como para dejarle ir. Antes que darles la carta de libertad, el club prefiere que se queden y puedan ser de ayuda en la Copa del Rey o en caso de lesión de varios compañeros.

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No los tendrá, casi seguro, Mariano, pues a pesar de la salida de Jovic, el Real Madrid prefiere que el relevo de Benzema sea Mayoral. Al contrario que otras temporadas, el canterano sí que está escuchando propuestas y podría abandonar el club en las próximas horas.

Si la operación salida fructifica, el Madrid no descarta afrontar algún fichaje para reforzar la delantera, la única posición que se ha quedado algo coja con la marcha de Jovic y la más que probable de Asensio o Mariano.