Muere una niña de 7 años tras sufrir un accidente cuando pilotaba un bólido en el circuito de Orlando

A su llegada al circuito, los servicios de emergencia encontraron a la niña en estado muy grave y procedieron a trasladarla de inmediato al Hospital infantil Arnold Palmer. El empleado herido, cuyas lesiones no ponían en riesgo su vida, fue ingresado en una clínica cercana.

Días después, los médicos certificaron la muerte cerebral de Elienisse. El triste desenlace fue confirmado por su familia a través de una página de GoFundMe creada para recabar ayuda económica para sufragar los gastos funerarios.

Noticia Relacionada

Muere tras un accidente Sid Veijer, joven promesa de las motos de solo siete años

ABC

Los hechos se produjeron mientras el neerlandés entrenaba en su país natal el pasado 22 de diciembre

La cuenta Oficial del circuito también publicó un mensaje de condolencia: «Estamos profundamente desconsolados por el trágico incidente que tuvo lugar en OSWD el domingo. Nuestros pensamientos y oraciones están con la familia de Elienisse, y todos los afectados, incluyendo nuestra comunidad de carreras. Los deportes motorizados se basan en la pasión, pero momentos como estos nos recuerdan los riesgos que vienen con lo que amamos. Aunque las lesiones pueden curar, el dolor de la pérdida es inconmensurable. Estamos unidos en apoyo, luto y oración durante este momento difícil. Expresamos nuestras más sinceras condolencias a los que están de duelo y seguiremos elevándolos en nuestros pensamientos».

Elienisse había celebrado su séptimo cumpleaños pocos días antes del accidente, el 30 de enero. Su pasión por el automovilismo le venía de familia toda vez que, según informaron medios locales, su padre y su abuelo son entusiastas de las carreras de 'dragsters'.

El vehículo que la niña conducía había sido especialmente preparado para su debut en la pista. Aún así, a pesar de contar con medidas de seguridad como jaulas antivuelco, arneses de cinco puntos, etc., esta modalidad de automovilismo es especialmente arriesgada.

Los dragsters son bólidos diseñados especialmente para pruebas de aceleración. Así, para arañar el máximo de tiempo posible, poseen una aerodinámica concebida para alcanzar velocidades extremas en línea recta. En las carreras de la máxima competición, la distancia recorrida más común es un cuarto de milla (unos 400 metros). Lo hacen en menos de 10 segundos, lo que lleva a estas bestias mecánicas a superar con holgura los 400 km/h.

En la modalidad junior (pilotos de 7 a 17 años), la distancia se reduce a la mitad: un octavo de milla (unos 200 metros). En consecuencia, la velocidad que alcanzan se reduce, pero aún así los jóvenes, jovencísimos, pilotos superan los 120 km/h en un visto y no visto.