El dúo español, quinto en la rutina técnica

Se habían quedado muy cerca del bronce en la rutina libre, pero les ha pesado la tradición de la técnica y el ejercicio de las ucranianas, Lolita Ananasova y Anna Voloshyna (93'135) que ha sido mejor valorado.

La técnica siempre ha sido el punto menos fuerte de la sincronizada española. Mengual y Carbonell trataron de ajustar esos detalles en los últimos días, aunque les faltó algo de sincronía en los movimientos durante su actuación. No obstante, en la natación sincronizada el papel de los jueces es como otro ejercicio más dentro del agua , pues siempre tienen en cuenta la trayectoria de los dúos o de los equipos y juegan mucho en función de sus memorias. «Nosotras tenemos capacidad de ir a muerte en la final, pero habrá que ver lo que los jueces puntúan », concedió Carbonell.

Las que tienen por encima de todo siguen siendo las rusas. Acompasadas como siempre y con notas espectaculares como siempre. Natalia Ishchenko y Svetlana Romashina triunfaron con 96'4577 puntos. Por detrás, China, que tampoco falla. Y más apretada estará la lucha por el bronce con Japón, Ucrania, que animó a la grada con su música y recibió un gran aplauso de la piscina María Lenk, y el dúo español.