Fútbol
Lampard, un apagafuegos con puño de hierro
Champions League
Firmado ahora para tres meses, sus normas pasaron factura a Lampard en la primera etapa como entrenador del Chelsea, rival este miercoles del Madrid en la Champions
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Lampard, este martes en el entrenamiento del Chelsea previo al partido con el Madrid
Un 'bombero' para intentar reconducir un proyecto en el que Todd Boehly, su nuevo patrón, ha invertido más de 600 millones de euros en fichajes a lo largo del curso. El Chelsea, que a principios de abril daba un volantazo con la destitución ... de Graham Potter, se ha encomendado a Frank Lampard (44 años) y a su particular libro de estilo para sofocar el incendio en la Premier League (donde ocupa el puesto once) e intentar sorprender al Real Madrid en la eliminatoria de cuartos de final de la Champions que se abre hoy en el Bernabéu. Un vestuario al que ya dirigió, con pena y sin gloria, durante la temporada y media que duró su primera aventura en el banquillo 'blue' (2019-2021).
El exinternacional inglés forma parte de esa estirpe de futbolistas que tras la retirada terminan prolongando su viaje deportivo entrenando a los clubes en los que se convirtieron en leyendas con el balón. En su caso, como jugador dejó huella al liderar la maquinaria ofensiva del centro del campo del conjunto londinense, con el que celebró la primera de las dos Copas de Europa que lucen en Stamford Bridge, pero se estrelló como técnico. Por los malos resultados (44 triunfos, 25 derrotas y 15 empates en 84 partidos) y por la tensa relación que acabó teniendo con parte de una plantilla a la que aplicó un código disciplinario estricto. La seriedad y el compromiso continúan siendo para él valores irrenunciables.
Con el objetivo de buscar el máximo compromiso de su plantel, Lampard impuso en su anterior etapa un amplio abanico de multas a todo el que incumpliera un rígido decálogo de reglas. Las sanciones que la prensa inglesa dio a conocer tras su despido llegaban a superar los 20.000 euros. El castigo más alto (23.000), para el que llegara tarde a un entrenamiento.
Ese código pasó también factura al bolsillo, por ejemplo, de los jugadores a los que les sonaba el teléfono en una comida o a los que no lucían la indumentaria correcta en los viajes. Informar de una enfermedad o lesión con menos de una hora y media de tiempo antes del inicio de un entrenamiento acarreaba 12.000 euros. El dinero recaudado acababa en organizaciones benéficas, pero esa mano dura alejó al técnico de parte de su plantilla.
Viaje de ida y vuelta. Lampard, hijo de un exjugador del West Ham ganador de dos FA Cup y sobrino del famoso extécnico Harry Redknapp, ha regresado al Chelsea después de ser despedido el pasado enero por el Everton. Once derrotas en las primeras 18 jornadas de la Premier fueron su condena. Una estadística que no han tenido en cuenta los dirigentes del club en el que asume el reto de intentar eliminar al rey de la Champions. «Fue un grandísimo jugador que tuve la suerte de entrenar durante dos años, un profesional fantástico y extraordinario. Conoce muy bien lo que puede pasar en este tipo de partidos. Llegó hace una semana, pero conoce a muchos jugadores y creo que lo va a hacer bien», destacó ayer Ancelotti, exentrenador de los londinenses, al ser preguntado por su antiguo pupilo.
Jugador del Chelsea entre 2001 y 2014, Lampard, que el fin de semana redebutó con derrota en la liga frente al Wolverhampton (1-0), sigue siendo un hombre de la casa y no ha puesto trabas para regresar al club que le abrió la puerta de salida en enero de 2021 sin conquistar ningún título y convertido en el peor entrenador de la era de Roman Abramovich.
Un estigma que no ha impedido que el norteamericano Todd Boehly levantara el pulgar para una vuelta con fecha de caducidad, el 30 de junio, cuando pondrá en manos de otro técnico el proyecto de la próxima temporada. Suenan Luis Enrique y el alemán Julian Nagelsmann.
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