Villa, el quinto chasco del Madrid

El clima hostil que se había creado en torno a la operación ha terminado con un golpe encima de la mesa. «Villa es intransferible», dijo el presidente del Valencia después de mantener una reunión con el representante del jugador. Carpetazo al asunto. Y golpe a las pretensiones del Real Madrid.

Agujero negro

Una decisión que alimenta la teoría de la existencia de un agujero negro en las relaciones entre ambos clubes, sobre todo a raíz de la aparición de Florentino Pérez y de Manuel Llorente. El Valencia ha dado hasta en cinco ocasiones el portazo en las narices al conjunto blanco.

El primer encontronazo llegó con Gaizka Mendieta en el año 2001. Jaime Ortí era el presidente del Valencia, pero llevó las negociaciones Manuel Llorente y el jugador acabó en el Lazio por un precio inferior al que se pedía al club blanco. Dos años más tarde, el proyecto de Florentino apostó por Fabián Ayala. Nuevos roces. Más hostilidad, pero el defensa no cambió de equipo.

David Albelda y Vicente también fueron tanteados por el Real Madrid. Agua. Ese deseo de reforzar el equipo a costa de las estrellas valencianista abrió una brecha que aún no se ha cerrado. Y que sangra cada vez que el Madrid llama a la misma puerta.

El nuevo movimiento de Manuel Llorente lo entiende el conjunto blanco como un portazo. «Ahora no hay que esperar. Visto el clima que se había creado en Valencia, no queríamos ir más allá en las negociaciones. Tendremos que mirar hacia otro lado. Negredo nos interesa mucho y es una posibilidad seria que pueda quedarse en el primer equipo ¿Romper relaciones? No, en absoluto. Si hay alguna posibilidad de negociación con otros jugadores, lo haremos», señaló Jorge Valdano a ABC.

Promesa al jugador

La realidad es que ahora el Real Madrid está exento de responsabilidad. Todo dependerá del jugador. David Villa tenía un compromiso del presidente del Valencia para abandonar el club porque necesitaban dinero. En esa promesa se estableció que lo venderían por 40 millones de euros, un valor que se ha incrementado cuando el conjunto blanco se metió por medio.

David Villa queda en una situación compleja y débil. De momento guarda silencio en Suráfrica. Está que trina y el culebrón se puede enredar si finalmente levanta la voz contra el Valencia. Hay que recordar que el «7» amplió su contrato con el Valencia el año pasado hasta el 30 de junio de 2014, también cuando fue tentado por el Madrid.