La esperpéntica reacción de un equipo tras un polémico penalti

Tras las habituales protestas de los futbolistas perjudicados por la decisión del juez del choque, comunes a cualquier liga del mundo, llegó el esperpento. Comenzó ya en el lanzamiento de la pena máxima, cuando el portero del Long An decidió no intentar detener el lanzamiento y prefirió girarse y ponerse de espaldas al lanzador.

El gesto fue secundado por sus compañeros que tras el consiguiente saque de centro, se quedaron parados. Una circunstancia que aprovecharon sus rivales para ampliar la ventaja en el marcador y que dejó un nuevo detalle del portero derrotado, con una ridícula voltereta cuando el rival le encaraba.

La jugada se repitió en el siguiente saque de centro, aunque ya en esta ocasión el guardameta del Long An decidió no hacer más extravagancias. Al final, en el marcador quedó el 5-2.