Falcao vuelve a hacer campeón al Atlético

Lo reconocía en la previa el propio Fernando Torres , cuya mirada perdida tras el tercer gol del Atlético rezumaba cierto aire de melancolía. «Simeone está consiguiendo lo que el club llevaba tantos años buscando, aunque aún le falta trabajo». Las palabras del niño daban valor a los tres títulos conseguidos hasta entonces, pero exigían algo más. Un partido grande de verdad ante un rival de enjundia. Uno de esos que centraran las miradas europeas y que devolviera los focos al Manzanares. Como antaño. La ausencia en la Liga de Campeones obligaba a que ese día fue hoy y el Atlético no falló. Demostró a Europa que está de vuelta y que su irrupción no es pasajera. [Fotogalería: las mejores imágenes del partido]

Pasó el Atlético de los titubeos iniciales, golpeando al Chelsea desde el arranque del partido. Nada de tanteos. Mordisco a la yugular que llevó la firma de Falcao . Voraz como siempre, a los cuatro minutos de juego el delantero rojiblanco ya había estrellado un balón en el larguero y solo tres después celebraba su primer tanto de la noche tras resolver con calidad un pase mágico de Adrián. Por entonces, el Chelsea aún creía que la avalancha sería pasajera. Que podría imponer su fortaleza física en el centro del campo para ir ganando terreno hacia los dominios de Courtois. Ilusiones que se vinieron abajo con el segundo zarpazo de Falcao, el más espectacular de la noche. El colombiano recogió un balón perdido en la espalda de Cole y lo situó en la escuadra de Cech, impotente ante el lanzamiento del ariete.

La avalancha rojiblanca se tomó entonces un respiro. Reculó y esperó en su campo. Esa fue una de las virtudes del Atlético, que supo tener paciencia aguantando atrás las embestidas infructuosas del Chelsea para salir al contragolpe con una velocidad fulgurante. Mikel, demasiado solo en el centro del campo, hacía aguas en su intento por contener las oleadas del Atlético, que llegaba con una facilidad inusitada al área de Cech. El checo salvó del desastre al Chelsea y evitó una goleada que pudo ser histórica.

El portero le sacó un mano a mano a Gabi a la media hora, vio luego como Adrián y Falcao eran incapaces de convertir en gol una asistencia de lujo de Arda Turan y terminó claudicando poco antes del descanso ante Falcao, verdugo de nuevo con su tercer gol del partido . Un tanto que corona al colombiano como el mejor delantero del mundo. Un ariete voraz como no existe en el continente europeo. Capaz de marcar goles de todos los colores y con una facilidad innata para el remate, como lo avalan sus 37 goles en 40 partidos europeos.

La segunda mitad sirvió para evidenciar el domino atlético. Un gol para cada equipo —ambos tras un rechace en un saque de esquina— que redondearon un resultado histórico. Un resultado que devuelve al Atlético a la élite europea y que le obliga a retos mayores. La Champions espera.