Odio irreconciliable en el fútbol turco

Demirel, guardameta titular de la selección turca desde hace varias temporadas, vivió una de las noches más difíciles de su carrera. Acostumbrado a recibir todo tipo de improperios cuando visita ese campo con el escudo del Fenerbahçe, el portero no esperaba que la afición del Galatasaray le recibiera con continuos insultos y amenazas cuando saltó a calentar. Los radicales no cesaron y el arquero, conocido por su fuerte personalidad, terminó por encararse con uno de ellos.

Los ánimos no se apaciguaron y Demitel terminó estallando. El guardameta, después de llamar al entrenador de porteros, tomó el camino de los vestuarios, se quitó los guantes, los tiró al suelo y pidió el cambio a Fatih Terim. A pesar de su sorpresa inicial, el seleccioandor turco accedió y Babacan fue el portero que defendió el marco ante Kazajstán.

Turquía -que llegaba a ese partido como colista del Grupo A- se impuso por 3-1. Los turcos resolvieron pronto el envite con un doblete de Burak Yilmaz, el segundo gol de penalti, en la primera parte. En el minuto 82 sentenció Serdar Ariz, mientras que el gol de la honra de Kazajstán fue obra de Smakov, de penalti.