El embrollo de jugar en Europa

«Una adecuada organización deportiva, unas instalaciones que cumplan con la legislación, una estructura de personal competente, una organización jurídico-societaria idónea y un estado financiero saneado» son los requisitos que exige la UEFA para habilitar a un club la posibilidad de disputar sus competiciones.

La UEFA delega en la RFEF (Real Federación Española de Fútbol) para que se encargue de los trámites con los clubes españoles. La institución presidida por Ángel María Villar envía cada año la documentación a los clubes, que deben cumplimentar cada escrito antes de una determinada fecha. Después de varios pasos y valoraciones de un Comité de Primera Instancia y otro de Segunda Instancia, el 30 de mayo debe quedar resuelto el listado de clubes que han obtenido la licencia de cara a la siguiente temporada.

El Rayo Vallecano parece que no conseguirá este sello. El club madrileño presentó este lunes al Comité de Segunda Instancia unos documentos que acreditan que la deuda es anterior a la entrada en Ley Concursal y que no es exigible ya que el proceso concursal prohibe pagar a nadie hasta que no se apruebe un nuevo convenio por la Junta de Acreedores. Pero el Comité denegó un día después el recurso de la entidad vallecana y, finalmente, el Rayo no jugará la Europa League si consigue clasificarse. La única posibilidad de conseguir la licencia es que el club franjirrojo decida recurrir al TAS, algo que estudiará y valorará el club durante esta semana.

Por su parte, ese mismo día el Español obtuvo la licencia definitivamente, por lo que podrá disputar competiciones europeas. Esta temporada, el octavo clasificado podría jugar la Europa League si el Tribunal de Arbitraje Deportivo mantiene la sanción al Málaga .