Las azafatas se rebelan: «Es una profesión tan digna como otras»

La decisión no ha dejado indiferente a nadie y las grandes perjudicadas, las propias azafatas no han tardado en levantar la voz . Incluso cadenas como la BBC han dedicado muchos minutos de su programación para debatir la cuestión. Hay que tener en cuenta las consecuencias de la medida, que dejará sin trabajo a más de 1.100 personas cada temporada . Entre parrilla y el paddock se emplean a unas 75 azafatas en cada Gran Premio. «No sé cuál es el motivo real de esta decisión porque ser azafata es una profesión y es tan digna como cualquier otra. Son chicas muy preparadas, que saben idiomas y que representan a una marca . No es cierto que se denigre a la mujer. Además, se cuida mucho la vestimenta y se huye de la ordinariez y la vulgaridad. Se está creando vulgaridad donde no la hay», explica Vicky Valdazo, directora gerente de Grandes Rasgos , la agencia de modelos que mantiene desde 1995 un acuerdo con Dorna para nutrir de paragüeras y azafatas los Grandes Premios de Motociclismo.

Precisamente, el vestuario es una de las cuestiones que se ponen encima de la mesa . El propio Marc Márquez se ha pronunciado sobre este tema: «Es un trabajo más, muchos chicos y chicas se dedican a ello y es respetable. Con una vestimenta adecuada, regulando este aspecto, me parece un trabajo respetable al cien por cien, que lo han hecho chicos y chicas completamente felices y con pasión». A pesar de las presiones que ha recibido Dorna para eliminar a las «grid girls» , la empresa que tiene los derechos de los campeonatos de Motociclismo mantendrá a sus azafatas en la parrilla y en el paddock. La empresa organizadora del Mundial se ha cargado de un plumazo las dudas sobre el efecto cascada que podría desencadenar la resolución de Bratches y ha dejado bien claro que las personas que se contratan y la indumentaria que utilizan es responsabilidad de los equipos, por lo que ellos se mantienen al margen. En este sentido, desde la Asociación Española de Empresas de Azafatas (ADEAZA) inciden en este punto. « La solución no debería ser eliminar las azafatas de los eventos deportivos, sino educar a esos clientes que solicitan esos perfiles y esos uniformes».

Otra solución pasa por aumentar el porcentaje de varones que realicen el trabajo. «Los hombres también pueden realizar este trabajo. Tal vez habría menos polémica si hubiera una mezcla», explica Valdazo. No obstante, reconoce que «muchas marcas no quieren a chicos porque cada una tiene un perfil y buscan lo que más les conviene». Además, la propuesta no cuajó cuando se probó en el Gran Premio de Europa de 2008 . En el GP de Mónaco de 2015 también se sustituyeron todas las azafatas de la parrilla por azafatos. «¿Por qué no hay chicas aquí? Esto no es aceptable. Esto es Mónaco y es parte de la carrera. Es una tradición y las tradiciones buenas no debemos romperlas . Voy a tener que hablar con Bernie Ecclestone para ver qué está pasando», bromeó Vettel .

Precisamente, el exjefe de la F1 ha sido muy crítico que con la medida adoptada esta semana: «No puedo entender cómo puede ser ofensivo para alguien el hecho de que haya una chica guapa con un número delante de un coche de F1. Estas chicas eran parte del espectáculo. Forman parte del glamour ». Ecclestone resume el sentir de la mayoría de pilotos. «Las azafatas deben seguir en el deporte», pidió Max Verstappen . Y Daniel Ricciardo añadió en broma: «Sería una pena si quitamos las buenas vistas de la parrilla. ¿Qué será lo siguiente? ¿El Halo?». La agencia encargada de proveer de azafatas a la Fórmula Uno declinó realizar manifestaciones pero fuentes cercanas lamentaron la medida, que deja sin trabajo a muchas chicas jóvenes al que este trabajo les ayuda a pagare los estudios. Normalmente perciben unos 300 euros por jornadas de unas ocho horas.

«No nos afectará solo a nosotros, a las agencias y a las azafatas en sí, sino que también afectará gravemente a la publicidad de las marcas . Van a tener que modificar mucho su forma de publicitarse y buscar fórmulas alternativas», advierte Valdazo, que se pregunta: «¿Van a eliminar a todas las azafatas también de los Congresos o incluso de los actos que organiza la Casa Real?». Desde «Grandes Rasgos» tratan de desmontar la teoría de que se cosifica a la mujer y se la trata como un objeto: «Al igual que para jugar al baloncesto tienes que ser alta o para practicar halterofilia tienes que ser fuerte, para ser azafata, al margen de tener una preparación cultural, tienes que tener una cierta belleza. Y eso no es denigrar a la mujer . Ahora resulta que habrá que pedir perdón por ser guapa...».