Ya en el primer asalto había demostrado cuál iba a ser su estrategia. Con 14 golpes en la cara frente a menos de 10 en el torso y las piernas, Topuria dejó que Volkanovski le buscar las cosquillas con golpes lejanos e intentos de desquilibrio que no pudo completar.
No fue hasta el arranque del segundo round, cuando Topuria, que ya había acorrado antes a Volkanovski en lo que iba a ser toda una declaración de intenciones, sacó un torbellino de puños que mandó a dormir al 'abuelo'. Con cara de haber sido arrollado por un toro embravecido, Volkanovski intentaba entender qué le había pasado y cómo era posible que Ilia Topuria, candidato a todo pero aún sin palmarés, le había quitado la corona.
Se había cumplido su sueño: Ilia Topuria era campeón del mundo del peso pluma de la UFC.
Era la primera vez que Volkanovski se veía en esta tesitura. Después de haber defendido hasta en seis ocasiones el cinturón, el 'Matador' Topuria se confirmó como su kriptonita, después de dejar claro que su rapidez y versatilidad a la hora de defenderse y contraatacar iba a ser clave.
Ahora queda por ver si ambos vuelven a verse las caras. Nada más acabar la pelea de su vida, Topuria abrió la puerta a una revancha. Y lo hizo con palabras que dejan claro que no va a ponerle las cosas fáciles, ni a Volkanovski ni a nadie (hola, Conor McGregor): «Si tienes pelotas, te espero en España».
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