El Covid machaca al pelotón de la Vuelta

Estas bajas se unen a las del irlandés Sam Bennett (Bora) y el conquense José Herrada (Cofidis), que no participaron en la contrarreloj de Alicante.

Los corredores viven en una burbuja en la Vuelta, apenas se relacionan con nadie externo al equipo, y tienen prohibida la relación con familiares. El protocolo para interactuar con la prensa es severo: los periodistas están obligados a utilizar mascarillas FP2 al entrar en el parking de los conjuntos durante las salidas y las metas.

Los periodistas tienen que someterse a un control de antígenos en cada día de descanso para continuar en carrera. Según informó la organización, ningún profesional de los medios ha dado positivo. La transmisión, sin embargo, parece mucho más rápida en el pelotón a tenor del número de positivos, veinte en total hasta este miércoles.

Los equipos no están obligados a retirar a los ciclistas si dan positivo por Covid. Queda a criterio del médico. «Durante la noche nuestro corredor Simon Yates presentó algunos síntomas de Covid 19 con fiebre leve y dolores corporales. Hicimos una prueba esta mañana y, lamentablemente, ha arrojado un resultado positivo», comunicó el doctor Daniel Castillo, del BikeExchange.

En apariencia Juan Ayuso tuvo todos los síntomas del Covid en la contrarreloj de Alicante, según describió su director Josean Matxín. «Le dolía la cabeza, tenía picor en la garganta y flemas, pero le hicimos tres test y todos dieron negativo». Sin embargo, sigue en carrera después de tres análisis negativos. El UAE dispone de una máquina que realiza test PCR y que decreta el nivel de contagio que puede transmitir un portador positivo.

El estrés esta mañana en la salida de la etapa en las instalaciones de El Pozo era palpable entre los equipos. Fuentes del Ineos informaron a ABC que Sivakov no presentaba síntomas de Covid, pero había resultado positivo en el test y el grupo británico decidió retirarlo «para preservar la salud de todos».

Juanjo Oroz, el director del debutante Kern Pharma, aseguró que «la organización de la carrera se había portado de diez», aunque tuvo que renunciar a dos corredores, Carretero y Grau, que no presentaban síntomas de la enfermedad.

A consecuencia de esta ola de positivos, la dirección de la Vuelta ha decidido que los medios de comunicación desplazados no accedan a los puntos de contacto con los ciclistas en las salidas y en las metas, y solo puedan trabajar en las zonas mixtas habilitadas, pero no en el parking de los conjuntos. A pesar de que la transmisión se está produciendo entre los integrantes del pelotón y no entre los expedicionarios de la carrera.

«Hay un protocolo de la UCI cuando hay un caso de Covid positivo y es lo que se está aplicando», adujo el director general de la ronda Javier Guillén.

La undécima etapa transportó el calor desde Alicante hasta Almería, donde el manual de funcionamiento del pelotón se movió en los parámetros conocidos. Una escapada del trío de invitados (Euskaltel, Kern Pharma y Burgos-BH), una fuga condenada a la nada y un esprint con vencedor sorpresa, el australiano Kaden Groves.

El peor parado del día insípido fue el campeón del mundo, Julian Alaphilippe, quien se se fue de bruces en una curva al final de la etapa y se rompió la clavícula. Evacuado en ambulancia, el francés no podrá defender su título y su maillot arcoíris en el Mundial que se celebrará en la ciudaad australiana de Wollongong. En un año pésimo, su caída en la Lieja y su ausencia de resultados (una etapa en el País Vasco y otra en el Tour de valonia) 'Lou lou' aspiraba a su tercer entorchado mundial.