El Barça gana en Milán para soñar alto

Igualado el duelo hasta el descanso, el Barça Lassa salió de nuevo a la pista con una marcha más, centrándose en no dar un milímetro de espacio gratis en defensa, y con un mayor acierto ofensivo para crear un cocktail explosivo para un Milán que, pese a los 20 puntos de Mike James y Vladimir Micov, ahora pierde fuelle en la tabla.

La importancia de esta victoria es enorme, no sólo por permitir a los blaugranas seguir soñando con estar entre los cuatro primeros , sino porque aleja al Milán, un rival directo, a dos victorias. Aire puro para unos catalanes que, en lo que queda, jugarán muchos más partidos en el Palau Blaugrana que fuera.

El Barça Lassa ganó este partido desde la defensa, a la que tanta importancia le da Svetislav Pesic. El técnico no se cansa de decir que sin defensa ningún equipo llega lejos, y en un tercer cuarto de despegue se enrocaron atrás para tomar ventaja.

El 20-29 del tercer cuarto les hizo abrir el definitivo con una ventaja de ocho puntos (57-65), un colchón que sirvió para templar los nervios, para ahondar en ese excelso trabajo defensivo y matar al Milán y el partido.

Destacó Adam Hanga (15 puntos, 5 rebotes y 3 robos), vital con su defensa pero también al culminar contras tras robo e incluso atreviéndose desde la línea de triple. El húngaro, junto a un Thomas Heurtel (21) sin freno y Kevin Seraphin (16) atrapando rebotes ofensivos y machando desde la pintura fueron claves para amarrar el triunfo.

Con este, ya son cuatro los partidos consecutivos ganados para poner un balance de 10-7 que les refuerza en su posición de 'playoffs'. Una victoria, con una máxima de 12 puntos (68-80), lejos del Palau para seguir ahuyentando los fantasmas del pasado, que sólo dejaban al Barça ganar unos tres duelos como visitante por año.