real madrid
Mourinho recupera la magia de Kaká
El técnico portugués no olvida. Ozil y el brasileño le salvaron de la crisis. Jugaron. Y lucieron
TOMÁS GONZÁLEZ-MARTÍN
Kaká, Ozil y Xabi Alonso . Mourinho es sincero. Reconoce los méritos. Los futbolistas que deciden deben jugar. El alemán y el brasileño le sacaron del desastre frente al Rayo, después del 0-1 del miedo , y el portugués se arriesgó en ... la Copa de Europa con la alineación más creativa desde que fichó por el Real Madrid. El equipo sufrió al principio con tantos hombres de toque. Hubo lentitud. Hasta que una jugada de Kaká abrió el partido y todo cambió. Fue la noche de Ricardo. La necesitaba. Di María, castigado inicialmente en el banquillo por su expulsión del sábado, ha recibido un aviso.
El entrenador había lanzado a Ozil y al brasileño un mensaje verbal: «Xabi Alonso no puede hacerlo todo solo. Los tres pueden estar juntos si Ozil y Kaká asumen que deben ser centrocampistas. Los dos son “diez” puros y deberían jugar de otra forma para poder alinear a los tres». Los dos futbolistas captaron la misiva. Serían titulares si bajaban a trabajar y no se quedaban arriba a esperar los pases. Eran ellos los que debían descender para darlos.
El proyecto tardó en cuajar ante el Ajax. El Real Madrid no encontró espacios. Hasta que Ozil y Kaká movieron el balón, Benzema entró por las bandas y el rival sufrió el mal de tanta calidad.
Altintop debuta
Un desmarque de Karim abrió el encuentro. Kaká le cruzó un centro en diagonal, el francés continuó el contragolpe con el pase de la muerte y Cristiano transformó el 1-0. Era su gol número 29 en Copa de Europa.
Fue un golazo asesino de este Real Madrid que funciona a gusto a la contra . El duelo se revolucionó. Y entonces surgió el mejor Kaká. El brasileño anotó su diana número 25 en la Champions con un disparo colocado que hizo explotar todo el sufrimiento que lleva dentro.
El suramericano ha escuchado durante demasiado tiempo que no es el de antes. Mourinho le ha querido dar confianza paulatinamente. Sabe que su clase es esencial en los momentos difíciles. Lo hace todo fácil. Cuando consiguió su diana, sacó una rabia desconocida. Se le crispó la cara. Sacó el puño. Rezó a Dios. Ronaldo y Khedira le abrazaron. Saben lo que ha soportado.
Disfrutando, a placer, el brasileño regaló a Benzema el 3-0, con un pase que solo pueden dar los genios.Le hicieron un penalti, no señalado. Era la noche de su reivindicación.
El estreno de Altintop coronó el partido de la felicidad. No quiso cobrar un euro durante sus tres meses de baja. Ayer comenzó a sentirse de nuevo futbolista.
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