Prometedor debut de «Brawn GP» en el ensayo general de Montmeló
Tan sólo 72 horas después de anunciar oficialmente su regreso a la Fórmula 1, el remozado equipo Honda -rebautizado «Brawn GP» en honor a su salvador- realizó su puesta de largo ayer en el Circuito de Cataluña, en los penúltimos entrenamientos oficiales antes de Melbourne.
Fue un estreno austero, sin los alardes propios de otras épocas, pero mucho más brillante sobre la pista de lo que cabría esperar. Jenson Button, el único de los pilotos del equipo que se puso al volante en Montmeló, marcó el mejor tiempo por la mañana y acabó con el cuarto mejor registro por la tarde, todo un logro si tenemos en cuenta que era la primera vez que podían probar el coche sobre el asfalto. El mejor crono del día fue para el BMW de Heidfeld, seguido de Raikkonen. Nelsinho Piquet, quinto, acabó muy satisfecho con el rendimiento del R29, cuya configuración, como la del resto de monoplazas, es muy parecida a la que estará en la parrilla de salida del primer Gran Premio del año.
«A decir verdad, esperaba ser competitivo. Lo único que me preocupa ahora es la fiabilidad», resumía al final de la jornada el piloto británico desde la carpa de Force India, sede improvisada de la escudería hasta que la economía permita lujos mayores.
Para hoy está previsto que tome parte también el segundo integrante del equipo, Rubens Barrichello. El brasileño coincidirá sobre la pista con Fernando Alonso, que ayer no se subió a los mandos del R29 porque se encontraba grabando un anuncio en Madrid.
Además del estreno de «Brawn GP», la jornada sirvió para que Toro Rosso presentara en sociedad el nuevo STR4, el monoplaza con el que espera repetir los éxitos de la temporada pasada.
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