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ABC Cultural

Los riesgos del toro manejable

Solo Álvaro Lorenzo da una vuelta al ruedo en una corrida del Pilar que transmite escasa emoción

Álvaro Lorenzo, en un bonito remate Efe

Andrés Amorós

Esta Feria de Abril y Mayo alterna, como un carrusel, las cumbres con las simas. Pasamos del entusiasmo al aburrimiento y el enfado. La causa es el toro: de los encastados Victorinos a los débiles Juampedros. Un síntoma claro: del aplauso a algunos picadores, a ... reducir la suerte de varas a un puro simulacro . Como decía una publicidad, “la elección es bien sencilla”. Pero la comodidad de las primeras figuras sigue eligiendo el mal camino, aunque luego tuerzan el gesto, con disgusto, cuando los toros que ellos han elegido no valen para nada. Ellos sabrán lo que hacen.

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