Antonio Bañuelos, los toros del frío más allá de Filomena: «La nieve los tranquiliza»

Bañuelos, el nuevo presidente de la Unión de Criadores de Toros de Lidia , conoce de sobra lo que significa bregar con la nieve. Un manto de color blanco nuclear se adueña de todo el territorio en esta zona de Burgos. Con el temporal Filomena y sin él. Todo es frío y viento, heladas que calan los huesos y que hacen que la alimentación del ganado tenga que cuidarse con máximo esmero. «La energía tiene que ser superior por el frío, por lo que necesitan especial pienso y forraje», señala.

Lo fundamental, según comenta, es «preparar unos senderos antes de que llegue la nevada para tener acceso a las partes altas de la finca y dejar almacenado el forraje suficiente». Uno de los trabajos diarios será romper las placas de hielo de comederos y bebederos, con ayuda del tractor y un pico. Y añade: «El toro tiene mucha rusticidad y no tiene problema con el frío, el problema es cuando se va la nieve. La nieve lo tranquiliza, pisa bien sobre ella; en cambio, el hielo es lo malo».

Las temidas peleas por las posibles bajas no llegan con la nieve, sino cuando barruntan el vendaval . «Es lo que más les molesta y lo que les provoca mayor nerviosismo, el previo al viento».

Cuenta que el toro de lidia es «vago, se mueve muy poco; la vaca sabe buscar debajo de la nieve la hierba con la pezuña o bajar con el cuerno alguna rama de un roble, una carrasca o una encina, o hacer camas en la paridera ».

Precisamente, esa etapa la retrasan en esta ganadería a finales de febrero o principios de marzo. Ese es uno de los problemas de las divisas que no conviven habitualmente con la nieve. «Las ganaderías que no estén acostumbradas tienen que estar muy pendientes si están en parideras y sobre todo si son vacas primerizas . Las primerizas suelen estresarse con un golpe de frío y sin tomar calostros es difícil que subsistan».

En los últimos días, son muchos los hierros afectados por la borrasca con bautismo de la Virgen venerada en el santuario italiano de Mugnano del Cardinale. Numerosos ganaderos, mayorales y hombres del campo trabajan a destajo para cuidar su ganado en una muestra de lo que es el verdadero animalismo. Así se evidencia en un vídeo de la divisa brava del Montecillo , con miles de reproducciones en las redes sociales, en el que envían un mensaje con zasca a Pablo Iglesias y Sergio García Torres . En las imágenes se ve cómo el ganadero, contra viento y marea, se mete nieve adentro , pala en mano, para retirarla de los comederos. Y así en otros hierros como San Isidro, Hoyo de la Gitana, Montealto...

¿Preocupa esta borrasca a los ganaderos?, preguntamos al presidente de la UCL. «La preocupación viene desde diciembre de 2019. Apenas ha habido festejos y en 2020 solo se ha lidiado el 1 por ciento de la camada, con cantidad de pueblos sin toros. Aún no se saben los datos de las bajas exactas, pero se calcula que con el guarismo 16 puede haber cuatro mil reses». Un desequilibrio entre la oferta y la demanda que alarma al sector ganadero: «Aunque se haya disminuido mucho la cabaña brava, existe un gran desnivel».

Su deseo es el de toda la familia taurina: «Es urgente que se garantice un aforo de al menos el cincuenta por ciento para que puedan darse toros».