Damon Albarn reivindica su presente lejos del pasado de Blur

Escapando de su propia fama y de las multitudes que congregó la reunión de su aventura musical más celebrada, el británico vino a presentar «Everyday Robots», un valiente trabajo de melodías frágiles y atmósferas vaporosas y, tras recogerse en la intimidad de «LonelyPress Play» y «Everyday Robots» , redobló su apuesta por la versatilidad minando el repertorio con rescates de Gorillaz y , dos de sus proyectos paralelos, así como de un par de versiones desnudas de Blur.

Así, de las brumas dub de «Kingdom Of Doom» al perfil íntimo de «Hostiles» y del asalto sincopado a la canción de autor de «Photographs (You Are TakingNow)» a la euforia de «Mr. Tembo», Albarn se reinventó sobre el escenario como inquieto e inasible espeleólogo de la música popular. Una apuesta por la vida más allá de Blur que quedó perfectamente plasmada en esa versión acorazada de «Clint Eastwood» y en una «Heavy Seas Of Love» de corazón gospel que, ya al final, bordó junto a un coro de seis cantantes.

La primera jornada del Cruïlla dejó, además del chaparrón rítmico y el pulso caribeño de Calle 13 , imágenes tan curiosas como la de ver a a los estadounidenses Band Of Horses realzando el perfil balsámico y épico de sus canciones mientras, a pocos metros de distancia, se levantaba un «castell», o la de darse de bruces con la diversión en estado puro mientras Txarango , aventajados herederos de Dusminguet , abrían una nueva vía de escape para un festival sin tiempos muertos.