Robbie Williams: «Soy el primero en admitir que he cometido errores»

Todavía le queda por aguantar a un buen puñado de periodistas insaciables que le bombardearan con las mismas preguntas una y otra vez. Son las cinco de la tarde. Tras un interminable día dedicado a la prensa europea, no se aprecia en cambio ni huella de cansancio en su rostro, que se acomoda en un gran sofá blanco dejando a la vista sus chillones calcetines rosas. Su jersey gris con las mangas estampadas con gatos tampoco deja indiferente a nadie. Pero sólo alguien como él sabe enaltecer su desbordado ego y mimetizarse con su papel de showman en cuestión de minutos.

Eso sí, ya no es ese Robbie que en seguida saca su amplio repertorio de muecas, bromas y retórica deslenguada. El nacimiento de su hija Teddy le ha embarcado en un proceso de metamorfosis que parece haberle cortado las alas de la inestabilidad, la imprudencia y las adicciones.

Después de un largo silencio de tres años, irrumpió en la escena musical para anunciar su regreso con «Reality Killed The Video Star» en 2009. Ahora sólo un año después de «Takethe Crown» lanza un nuevo álbum, «Swings both ways» .

-¿A qué debe ese brote de creatividad repentino?

-En 2008 me retiré por completo. Digamos que fue un periodo de letargo,marihuana, patatas fritas con sabor a mostaza y miel y búsqueda de ovnis. Pasaba el día tirado en el sofá, viendo realities en la tele y era muy difícil salir de ese círculo. Tampoco necesitaba trabajar porque tenía dinero. Hasta que un día me pregunté quién soy realmente, tengo que levantarme de ese sofá y me hice la promesa de no volver a sentarme nunca en él. Y durante los últimos cuatro años la he mantenido. Mis músculos creativos, están bien lubricados para el show y aquí estoy de nuevo.

-Regresa al swing, con clásicos de siempre y seis temas inéditos, algunos de ellos cantados a dúo con Michael Bublé, Lilly Allen, Kelly Clarkson, OllyMurs y Rufus Wainwright.

-Soy fan de todos ellos y es una lluvia de talento en el disco.De todos modos sé que aunque haya regresado al swing, pronto estaré en una dirección diferente, desapareceré de nuevo, para regresar con más fuerza. Si estás siempre ahí acabas aburriendo.

-El año que viene cumple 40 años, ¿dónde se encuentras ahora mismo?

-Casado y con una hija. Antes la recompensa estaba en el éxito, los coches, las mujeres... Ahora he encontrado el sentido de mi vida en Teddy. Soy un cambiador de pañales superdotado. Hoy me levanté a las 5:30 y desayunamos juntos. Cuando estoy en casa, si ella está despierta estoy a su lado. La llevé a la guardería por primera vez hace dos días. Aprendió a caminar hace 10 días. Ella es el amor de mi vida, mi nueva droga.

-Eligió como primer sencillo oficial «Go Gentle», escrito junto con Guy Chambers, el cual está dedicado a la pequeña.

-Sí, tiene algunos versos de consejos que le puedo dar sobre la vida. Espero que cuando sea mayor tome mejores decisiones que yo y que su mamá.

-¿Qué ve cuando echa la vista atrás?

-Soy el primero en admitir que he cometido errores. Durante mucho tiempo, desde que tengo uso de razón, me he sentido un poco estúpido. Abandoné la escuela sin terminar la secundaria, dos viajes a rehabilitación, el álbum «Rudebox», Geri Halliwell.. ¿Debería haber ido a por Victoria en realidad? No, me hubiera hecho demasiado famoso.

-«Let Me Entertain You», «Angel» y «Feel», todos vienen de la pluma de Guy Chambers, hasta que decidieron romper su colaboración. ¿A qué se debe su regreso?

-Iba a ocurrir. El tiempo no está conmigo más. Dejé a Guy porque era demasiado, todo era él y sabía que tenía que hacer algo por mí mismo. Pero al mismo tiempo también sabía que volvería a trabajar con él, era inevitable.

-Encabeza la lista de los artistas más vendido en todo el mundo, con 70 millones de álbumes. Cuenta con 17 premios Brit, dos Grammy, cinco MTV y tres Guiness. ¿Qué le mantiene con ganas de seguir cuando ya ha alcanzado casi todo?

-Miedo, inseguridad, competitividad y tontería. Soy un ser humano y quiero mantener el éxito. El hacerme viejo no aminora mi ambición. Quiero seguir compitiendo, superándome. Es una tontería, pero es inherente al ser humano. Mi trabajo sólo tiene sentido con la aprobación de audiencia y ellos siguen allí. Lo noto en los conciertos cuando salgo y desgañitan al verme y al fin y al cabo yo pienso:«Esto sólo funciona si tú me permites hacerlo».

-En cambio, se le resiste el mercado estadounidense.

-Nunca fue mi sueño conquistar EEUU. Disfruto del anonimato allí, es un lugar donde realmente puedo disfrutar de los frutos de mi carrera. Aquí en Europa sería muy difícil vivir con la presión de los medios, gente detrás de ti persiguiéndote para sacar una foto… En América nunca descubrieron que pueden sacar dinero de mí.