Pablo Moro: «Nos movemos cada día en la cuerda floja»

En él le vuelve a acompañar su banda Los Chicos Listos , y a profundizar en los temas que afectan a todos en general y a todos en particular.

- ¿Quién puede decir que tiene hoy la vida solucionada? Aparte de quienes ya sabemos... ¿A qué te refieres?

-Supongo que la ironía es evidente. Es un disco en el que quería hablar de la incertidumbre, de cómo nos movemos, cada día, en una cuerda floja; cómo en cualquier esquina está esperándonos un golpe del azar o del destino que nos cambia los planes. Por eso esa expresión que usamos tan a menudo me parecía ideal para sostener exactamente lo contrario, que nadie puede tener la vida solucionada. Además es una frase que alude irremediablemente a un estatus económico así que dada la coyuntura me parecía el título ideal.

-Este disco comienza con la canción «Empezar de cero»... ¿Es una declaración de intenciones? ¿Qué representa este disco en tu carrera?

-No sé si llega a la categoría de declaración de intenciones, pero desde luego no es casual que esa sea la primera canción del disco. Desde luego sí que representa un cambio, un intento de ver las cosas de otra manera, más reposada, más serena, pero también más escéptica y crítica. Cómo dice Igor Paskual en la hoja de promo, un intento, no de cambiar el mundo, sino de plantearse seriamente empezar a construir uno nuevo.

-El álbum tiene un mes de vida, todavía es un bebé. ¿Cómo han sido sus primeros pasos? ¿Cómo ha sido el recibimiento?

-Bueno, en la música, afortunadamente para algunas cosas y desgraciada para otras, ahora las cosas van despacio. Las primeras impresiones están siendo positivas y la gente va recibiendo bien el disco. Yo estoy contento de todas formas, porque creo que es un gran disco y hay que empezar por ahí. Reconozco que no es un disco que entre fácil a la primera, necesita atención y paciencia. Ojalá la gente pueda dársela.

-¿De dónde nacen estas canciones? Parecen muy personales. ¿Tu forma de componer o de darles forma ha cambiado con el tiempo?

-Desde luego es el disco más personal que he hecho sin ninguna duda. He hablado mucho de mí, cada historia es vivida por mí y desde mi punto de vista. Estas canciones nacen de momentos emocionales muy intensos. Creo que esa es la mejor forma de llegar a los demás. Cuanto más miramos hacia adentro, más nos acercamos a los demás, así que espero que las cosas que a mí me emocionan puedan llegar a tocar el corazón de la gente. Supongo que mi manera de escribir tiende cada vez más a hablar de las cosas que tengo más cerca, ya sean paisajes o paisanajes.

-¿Cuál es la participación de Los Chicos Listos?

-Llevamos tocando juntos casi ocho años. Siempre digo que contar con ellos es una de las mejores cosas que me han pasado, no solo en la música, sino en la vida. No entendería mi música sin sus aportes ni su talento. Y además son mis amigos. No se puede pedir más.

-Tienes un estilo parecido a Quique González. ¿Se vive un buen momento para el cantautor de guitarra eléctrica?

-Pues no sé qué decir. Es cierto que en los últimos años han aparecido músicos que tienen que ver con la canción de autor y con el rock, y que han conseguido cierto reconocimiento. Pero ha sido a costa de mucho trabajo a lo largo de los años y no una moda pasajera. Creo que eso hará que permanezcan. Lo que sí creo es que la gente ha vuelto a demandar canciones, a ensalzar el género canción, y ahí hay gente con mucho que decir.

-Parece ser que en tus comienzo recibiste el apoyo de Melendi. ¿Cómo fue?

-Bueno, los dos fichamos a la vez por la misma discográfica. Somos amigos y empezamos casi a la vez en esto. Cuando consiguió su éxito me ayudó en lo que pudo y se lo agradezco mucho.

-Ahora vienes a tocar en Madrid. ¿Qué tal tus experiencias en este ciudad?

-Llevo muchos años viniendo a tocar a Madrid y siempre lo he considerado como una segunda casa. Tengo muchos amigos aquí y el público siempre es muy generoso. No tengo más que buenas palabras, siempre es un placer tocar en el Foro.