Carlos Zanón, sobre el nuevo Pepe Carvalho: «Respeto al personaje, pero será una novela hecha por mí»

El encargado de «resucitar» a Carvalho será nada menos que Carlos Zanón, autor barcelonés que después de reivindicarse como una suerte de cruce de Marsé, Casavella y Vázquez Montalbán con títulos como «Yo fui Johnny Thunders» o «No llames a casa», ha recibido el encargo de devolver a la vida al protagonista de «Los mares del Sur». Un desafío que, explica Zanón en declaraciones a ABC, le hace sentirse como si alguien le hubiese prestado un Ferrari con la única condición de dejarlo bien aparcado. «Ya se verá si me vuelven a dejar las llaves o me quitan el carnet de conducir» , bromea el escritor sobre un acuerdo con la editorial Planeta y los herederos de Vázquez Montalbán que, de momento, contempla un único título, una novela que Zanón ya ha empezado a escribir y se publicará previsiblemente en 2018, como ha avanzado hoy «La Vanguardia».

La trama, avanza Zanón, será un misterio hasta que salga el libro, pero sí que tiene claro que quiere traerse a Carvalho al presente y hacerlo suyo. «Respeto mucho al personaje, pero será una novela hecha por mí», señala. De hecho, el autor de «Marley estaba muerto» considera que lo que le conecta con Vázquez Montalbán, más que un determinado estilo, es una mirada particular sobre la ciudad de Barcelona, por lo que afronta el reto con total libertad.

«Intentaré respetar el alma del personaje», añade Zanón, quien descubrió a Carvalho con veintipocos años, cuando leyó «Los mares del Sur», y a partir de entonces mantuvo una estrecha relación lectora con Vázquez Montalbán. «Tenía un amigo que era un gran seguidor de la saga e iba picoteando de aquí y de allá -explica-. A partir de ahí, como en todas las series, hay novelas que gustan más y otras menos, aunque sí que fui muy seguidor del Vázquez Montalbán periodista. Y fuera de la serie Carvalho, también hay grandes libros. "Galindez", por ejemplo, es una novela brutal».

Entre lo poco que avanza Zanón sobre la novela, se sabe que Carvalho seguirá teniendo a mano una buena chimenea para practicar la quema selectiva de libros y que le acompañarán algunos de sus comparsas habituales («aunque otros no», añade enigmático). Su gran obsesión, sin embargo, parece ser la de mirar el presente a través de los ojos del personaje. «El mundo de los libros de Carvalho no es el de mi generación, es el de la generación de la posguerra, de mis padres», señala un autor que, antes de devolver a Carvalho a las librerías, entregará este mismo año «Taxi», su nueva novela después de la colección de relatos «Marley estaba muerto».