Caballero Bonald: «Realmente pensé que no era el candidato al Cervantes aconsejable para el Ministerio del PP»

Al llegar a casa de José Manuel Caballero Bonald , su esposa Pepa Ramis -«que me ha ayudado durante tantos años a no perder el norte»- ordena el fabuloso marasmo en el que los cámaras, reporteros y plumillas han convertido su hogar, repleto de libros por todos los costados. El flamante Cervantes, -«ya tocaba»-, descansa en un sillón, abrigado hasta el cuello. Lleva unas semanas con fiebre, una media de 39, y hace un esfuerzo descomunal para atender a los periodistas. Con generosidad infinita responde a las preguntas, y al finalizar su improvisada rueda de Prensa atiende, con extraordinaria deferencia, a ABC.

Nos lleva a otro saloncito, y se brinda al fusilamiento fotográfico al atardecer de mi compañera Isabel Permuy.

-Como diría Jesús Hermida, su turno, maestro.

-Sí, en verdad, ya era mi turno. Me honra el Cervantes.

-Un Ministerio de Cultura de un Gobierno de la derecha premia la obra de un escritor insobornable de izquierdas, luchador antifranquista, independiente y libre como usted. ¿Cómo lo interpreta?

-Eso mismo pensé yo. Cuando me ha llamado el ministro, ahora por teléfono, para darme la noticia he pensado que realmente me extrañaba,. Porque yo no era un candidato aconsejable para un Gobierno como el actual, del PP, para conseguir el premio Cervantes. Lo que es raro es que un premio que organiza el Ministerio de Educación y Cultura me lo hayan dado a mí que soy de izquierdas.

-¿El Cervantes es la culminación de una vida?

-Siempre piensa uno que el Cervantes es la meta, o el final de un camino que tú has andado. Estoy contento y satisfecho. Naturalmente me honra que el jurado haya decidido que mi obra completa merecer ser consideraba ejemplar en el sentido de merecer el premio. En todo caso, yo creo que el premio me correspondía hace dos o tres años. En este caso, como he estado enfermo en la cama, con fiebres, no me acordaba siquiera del premio. Pero bueno, siempre es una satisfacción, sin duda ninguna, y además me siento honrado.

-Le honra recordar a los otros candidatos al Cervantes en su pliego de gratitudes.

-Tengo una cierta desazón, de pronto se me aparece, porque hay compañeros que eran candidatos y no han conseguido el premio.

-Como su vecino de bloque Francisco Brines.

-Mi vecino Paco. Y Juan Goytisolo. Y luego, el maestro de cervantistas el profesor Martín de Riquer, que no hay premio más a propósito para el gran cervantista úniversal que es Martín de Riquer que el premio Cervantes.

(Mañana, la entrevista completa en la edición impresa de ABC).