Los funcionarios de Cultura se manifestarán el día 20 contra Iceta por el amianto del ministerio

Pese a que el ministro Iceta asegura que «en el edificio no hay ningún riesgo de contaminación por amianto», y en efecto los informes realizados dicen que los valores detectados están «muy por debajo del valor de referencia utilizado en España», desde CC.OO. no dan por buenas las explicaciones ofrecidas por el ministerio, ni las dichas públicamente tras revelar ABC esta situación ni las que la Subsecretaría General les ha ido transmitiendo a lo largo de los últimos meses. Consideran que el único valor seguro es cero, y más cuando el propio ministerio se comprometió hace más de dos años a diseñar un plan para retirar todas las placas tóxicas.

Como ha venido publicando este diario, fue a principios de 2020 cuando el ministerio, en unas obras de mantenimiento, detectó la existencia de placas de fibrocemento (amianto) en la fachada acristalada de las seis plantas del edificio y en un sótano. Los responsables del ministerio, entonces dirigido por José Manuel Rodríguez Uribes, encargaron de inmediato unas mediciones ambientales y obras en la segunda y quinta planta, en las que se había comenzado a trabajar anteriormente para arreglar los techos.

Tras concluir que los valores de exposición a esta sustancia potencialmente cancerígena en principio no eran dañinas, Cultura se comprometió en julio de 2020 a la retirada total de las placas de fibrocemento por ser esta «solución definitiva y de máxima garantía para la seguridad y salud de los empleados del edificio, no sólo actuales sino futuros».

Han pasado más de dos años y solo está libre de amianto la quinta planta, a la que se trasladó el despacho del ministro y de su gabinete. Esta 'mudanza' provocó que se tirara abajo la cafetería/restaurante, un servicio que no se ha recuperado aún. Según Iceta, que asumió la cartera en julio de 2021, esta decisión se tomó antes de que él llegara al cargo: «Yo ocupo el mismo despacho desde el primer día. Estoy ocupando el despacho que ocupaba el ministro anterior».

Los trabajadores, representados por los sindicatos, reclaman ahora la retirada del amianto de todas las plantas del ministerio. Los informes que Cultura realiza cada quince días siempre dan valores por debajo del límite considerado perjudicial, pero estos documentos insisten en que «no se ha podido determinar el nivel por debajo del cual la exposición al amianto no entraña ningún riesgo de cáncer».

Hasta la fecha, solo están contempladas obras para la retirada del amianto en la segunda planta del edificio, aunque el Ministerio de Cultura ha preferido no pronunciarse sobre este extremo. Los Presupuestos Generales del Estado para el próximo ejercicio recoge la retirada de las placas de fibrocemento detectadas en esa planta, y obras de renovación de todas las instalaciones cercanas a dichas placas: «eléctricas, iluminación, datos y fibra óptica, fontanería y saneamiento, sistema de climatización y ventilación, entre las más notables». Cultura ya ha pedido licencia al Ayuntamiento de Madrid, pero aún no ha sido concedida.

Esta no es la primera vez que Iceta tiene que enfrentarse a una concentración en Plaza del Rey. Los técnicos del Inaem se manifestaron el pasado mes de enero, después de varias huelgas, por la nueva regulación laboral que deja sin trabajo a muchos de ellos. También se concentró frente al ministerio la Asociación de Amigos de Vicente Aleixandre por la declaración de Velintonia como Bien de Interés Cultural. El sector del cine se movilizó en el Congreso de los Diputados por la ley audiovisual.

El ministro también tendrá que dar explicaciones ante la Comisión de Cultura, donde acudirá previsiblemente la semana que viene, después de que la semana pasada registrara una solicitud de comparecencia «para informar sobre la situación de la cultura en España y los avances en materia del Estatuto del Artista, bono cultural joven y participación en la Feria del Libro de Frankfurt». Los grupos de la oposición han registrado varias preguntas escritas para aclarar por qué, a estas alturas, sigue habiendo amianto en el Ministerio de Cultura.