libros
Bernhard Schlink, ¿se unieron las Alemanias?
Narrativa
En su nueva novela, el célebre autor de 'El lector', las confronta, cara a cara, simbólicamente, en el mismo y turbulento momento presente
Otras críticas de la autora
Bernhard Schlink (Bielefeld, 1944) es jurista y escritor
¿Se ha curado alguna vez Alemania de la difícil y costosa reunificación llevada a cabo en 1990, tras la caída del Muro? En la nueva y excelente novela del célebre autor de 'El lector', Bernhard Schlink (Bielefeld, 1944) jurista y escritor, las dos ... Alemanias, durante largo tiempo separadas tras la Segunda Guerra Mundial y la Guerra Fría, son confrontadas, cara a cara, simbólicamente, en el mismo y turbulento momento presente. Un momento en el que cierto tipo de nacionalismo exacerbado, criado en delirantes ambientes 'völkisch', que tan tristes recuerdos traen, así como el crecimiento nada despreciable de un recrudecido neonazismo, hacen saltar todas las alarmas para algunos.
Los protagonistas de 'La nieta' son Kaspar, un librero de Berlín de setenta años, nacido en la RFA, la Alemania occidental y federal, y su esposa escritora Birgit, recién fallecida, que provenía de la Alemania comunista, la RDA, y que tras su muerte se llevó consigo muchos secretos.
NOVELA
'La nieta'
- Autor Bernhard Schlink
- Editorial Anagrama
- Año 2023
- Páginas 356
- Precio 20,90 Euros
Secretos, que como descubre Kaspar, la atormentaban y que últimamente había estado volcando en su ordenador en una especie de memorias. Tras conseguir desencriptar sus archivos, Kaspar descubrirá de forma sorprendente que al huir de la parte oriental Birgit dejó atrás un bebé recién nacido, donado en adopción. Sin pensárselo dos veces, Kaspar se impone como misión ir en su busca, esa busca desesperada que Birgit nunca culminó.
Una búsqueda entre la bruma del pasado, unos secretos nunca revelados que, a pesar del amor que se profesaban, siempre los separó. Venían de dos mundos, dos culturas, dos ideologías y formas de entender la vida en las que habían sido criados. Reunidos desde los años 60 en el Berlín Oeste, las diferencias surgían en cualquier momento: «Birgit era siempre más reflexiva, más seria. La frivolidad, el espíritu juguetón, la superioridad irónica con que se hablaba en nuestro círculo de amigos le eran ajenos, y mucho más ajeno aún le resultaba que los políticos y los artistas no se tomaran en serio lo que hacían, que les bastara con llamar la atención de la gente, seducir al público».
Los protagonistas de 'La nieta' son Kaspar, un librero de Berlín nacido en la RFA, y su esposa escritora Birgit, de la Alemania comunista
Un arranque de la historia, la huida desde la Alemania oriental, que como ha confesado el propio Schlink, tiene que ver con su propia biografía: en 1965, con veintiún años, participó en Berlín en una reunión con estudiantes del Este y el Oeste. Allí conoció a una chica de la que se enamoró, consiguiendo traerla al oeste. Cuando murió hace tres años, aquella historia y huida le volvió a la memoria y elaboró la actual novela.
Cuando el culto y tolerante Kaspar, educado en los valores de la democracia, emprenda su viaje al Este, aquella porción de pasado borrascoso dejado atrás por Birgit se verá confrontado con la peor de las pesadillas. Un mundo de fantasmas que, como alemán de nuestros días, siempre creyó definitivamente enterrados. O al menos ignorados en sus más siniestros detalles.
Amargura
Atrapados en la amargura y en el resentimiento hacia un mundo democrático del bienestar, y su supuesta 'arrogancia', del que se sienten marginados («sois una cagadita de mosca en el mapa y pretendéis decirnos lo que tenemos que hacer»), Kaspar conocerá por fin la triste realidad: Svenja, la hija perdida en el Este, está casada con un violento nostálgico del Tercer Reich. Adoradores de Hitler y Rudolf Hess, y de criminales de las SS de Auschwitz como Irma Grese, ejecutada por los Aliados tras la guerra, han criado a su única hija Sigrun en medio de la ferocidad y el odio de esos ambientes ultrafanatizados, con campamentos aparte en los que conviven con familias como ellos.
Kaspar sabe que la generación de Svenja y su marido es una generación perdida. Pero desde ese momento, como una deuda adquirida con su mujer, intentará rescatar a la adolescente Sigrun de las garras de unos grupos neonazis, antisemitas y antiemigrantes que de nuevo no dudan en matar, en continuos enfrentamientos con izquierdistas y Antifas por las calles. Para ello, Kaspar emprende la 'sanación' de Sigrun a través de la música, de la lectura, del afecto y la razón: «Nadie va a volver a quedarse con Prusia Oriental y Silesia», le dirá a su nieta. «Alemania no será más grande, pero tampoco más pequeña y tampoco va a reventar por las costuras aunque lleguen muchos extranjeros ¿Qué pasa si alguien es una mezcla de extranjero y alemán?».