Abu Dabi cambia petrodólares por museos
La capital de los Emiratos Árabes Unidos proyecta un ambicioso Distrito Cultural en la Isla de Saadiyat ('felicidad')
En apenas 27 kilómetros reunirá edificios diseñados por prestigiosos arquitectos como Jan Nouvel, Frank Gehry, Norman Foster o Zaha Hadid
Abu Dabi aplaude por bulerías
Un aspecto del proyecto de la Isla de Saadiyat
Es revelador que la isla en la que las autoridades de Abu Dabi están construyendo lo que han bautizado como Distrito Cultural sea la isla de Saadiyat, que en árabe significa 'felicidad'. En apenas 27 kilómetros cuadrados -aproximadamente dos veces la superficie de ... la Ciudad Universitaria de Madrid- se concentrará en un futuro no muy lejano pero indefinido ('piano piano si arriva lontano', parece ser el lema de los emiratís) una deslumbrante reunión de edificios diseñados por arquitectos de tanto prestigio como Jan Nouvel, Frank Gehry, Norman Foster o Zaha Hadid. Y es que la mezcla y la integración parece ser una obsesión lógica en un país en el que el ochenta por ciento de sus habitantes procede del extranjero, y en el que la cultura se plantea como un puente entre Oriente y Occidente. Huda Alkhamis-Kanoo, una importante mecenas emiratí, y directora artística del Abu Dhabi Festival, lo resume así: «La solución es la cultura. Elimina todas las diferencias; todos hablamos el mismo lenguaje: el lenguaje del entendimiento». Y no solo se repite este leitmotiv en asuntos culturales, también en lo social; de ahí que en la Gran Mezquita de Abu Dabi dos de sus lemas sean 'Tolerancia' y 'Coexistencia' (aunque las mujeres sigan teniendo que cubrirse para visitar el lugar, un deslumbrante edificio pensado tanto para el fiel como para el turista).
El Distrito Cultural será en el futuro algo parecido a un parque temático de museos y arquitectura. Las autoridades abudabíes presumen de que «a través de sus museos, centros culturales e instituciones educativas, el Distrito contará con una de las mayores concentraciones de experiencias culturales del mundo.
La primera piedra de este ambicioso proyecto -que está acompañado también, claro, de un plan urbanístico y turístico- es el Louvre de Abu Dabi. Creado en marzo de 2002 gracias a un acuerdo entre los Gobiernos de Francia y Abu Dabi, fue diseñado por el arquitecto francés Jean Nouvel y abrió sus puertas en noviembre de 2017. También tiene como leitmotiv mostrar el nexo de unión que supone la cultura. Con motivo del quinto aniversario del museo, su director, el francés Manuel Rabaté, decía: «Nos complace ofrecer a nuestros visitantes numerosas oportunidades de aprender, explorar y celebrar momentos de conexión cultural. Seguimos comprometidos con la construcción de una comprensión de la humanidad compartida».
El museo cuenta con una colección de cerca de 700 piezas, entre ellas cuadros de Rembrandt, Jacob Jordaens, Paul Klee, Giovanni Bellini, Bernhard Strigel, Pierre-Auguste Renoir o Kazuo Shiraga; un acuerdo con trece instituciones francesas (entre ellas, además lógicamente del Louvre, que presta todos los años 100 obras maestras de sus fondos, el Museo d'Orsay y el Centro Pompidou).
El presente del Distrito Cultural también incluye el Manarat Al Saadiyat, un centro cultural que alberga exposiciones, ferias de arte y distintas actividades; y la Casa de la Familia Abrahámica, que reúne en un mismo espacio tres edificios similares diseñados por el arquitecto David Adjaye: una iglesia, una mezquita y una sinagoga, «para inspirar y fomentar la aceptación y la coexistencia pacífica entre personas de todas las creencias, entre personas de todas las religiones».
MÁS INFORMACIÓN
El futuro está todavía en construcción. Saadiyat es todavía un bosque de grúas y andamios. Dos proyectos destacan sobre el resto: el Guggenheim de Abu Dabi, obra de Frank Gehry, y que estará concluido previsiblemente para finales de 2025; y el Museo Nacional Zayed -en memoria del primer presidente del país-, de Norman Foster, que tras varios retrasos tiene previsto abrir sus puertas ese mismo año 2025. Otros proyectos en distintas fases de desarrollo son el Centro de Artes Escénicas de Abu Dabi, diseñado por Zaha Hadid; Phenomena, obra de los japoneses teamLab, y que combinará arte y tecnología; y la sucursal emiratí de la escuela de música Berklee, diseñado también por Norman Foster.