Las extrañas criaturas bosquianas, hasta en la sopa

Bolduque ha tirado la casa por la ventana para recibir al Bosco: más de 90 actos durante todo el año y un presupuesto de 26 millones de euros, que esperan rentabilizar con un millón más de visitantes de lo habitual en 2016. El carnaval ha tenido un solo protagonista: El Bosco . Parecía como si todas las criaturas de sus cuadros hubiesen salido de los lienzos para desfilar por las calles de Bolduque. Y hasta por las fachadas de los edificios. Una de las actividades del llamado Bosch Experience es un espectáculo de luz y sonido que, de marzo a diciembre, devolverá a muchos de los personajes del Bosco al lugar donde nacieron: su taller en la plaza del mercado (presidida por una estatua del artista, obra de August Falise).

La casa es inconfundible, con su fachada verde. En los bajos hay hoy una tienda de souvenirs. Se proyectarán por la noche sobre los edificios de la plaza animaciones de sus creaciones en movimiento. En esta misma plaza otra de las casas fue su residencia, pero no queda nada de la arquitectura original. Una de las propuestas más atractivas es un paseo en barco por el milenario Binnendieze (un sistema de canales que discurre por el interior de las antiguas murallas de Bolduque ). Gracias al videomapping y las proyecciones en 3D, durante el recorrido el visitante se sumerge en la obra y la época del Bosco. Tendrá lugar del 1 de abril al 31 de octubre. Para quienes no tengan miedo a las alturas es muy recomendable un ascenso a lo más alto de la bellísima catedral de San Juan, de estilo gótico, para ver de cerca el casi centenar de gárgolas que adornan su fachada (del 5 de marzo al 30 de octubre). Están inspiradas en los personajes del Bosco. En el centro de la ciudad se puede visitar la Zwanenbroedershuis, sede de la Hermandad de Nuestra Señora, una elitista organización fundada en 1318, a la que pertenecieron reyes, nobles y artistas como El Bosco , cuyo archivo ha permitido conocer lo poco que sabemos del artista.

El programa de actividades culturales que ha organizado Bolduque para celebrar el V centenario de la muerte de su pintor más célebre es inabarcable. A la retrospectiva del Museo de Brabante del Norte se unen exposiciones de artistas como Jan Fabre, Pipilotti Rist, los hermanos Chapman o los españoles Nacho Carbonell (sus sillas y lámparas surrealistas evocan las obras del Bosco ) y Fernando Sánchez Castillo, que abordará la fascinación de Felipe II por el maestro holandés.

No faltan en la programación las artes escénicas. El miércoles fuimos testigos privilegiados en el Theater aan de Parade del ensayo general de un bellísimo espectáculo a cargo de la Dance Company Nanine Linning, quien ha coreografiado «Hieronymus B.», basado en los cuadros del Bosco y que se estrenó anoche. Los bailarines danzan dentro de los trípticos, pero también salen fuera de ellos e interactúan con los espectadores. Por destacar una última propuesta, el estreno mundial, en noviembre, del «Réquiem para Bosch» en la catedral de San Juan. Compuesto por Detlev Glaner para el V centenario del pintor, sonará a cargo de la Orquesta del Koninklijk Concertgebouw bajo la batuta de Markus Stenz.