Carlos Urroz, candidato de Ifema para ser el nuevo director de ARCO

Por otra parte, los galeristas que forman parte del comité organizador de la feria estuvieron ayer muy activos. Mantuvieron a mediodía un encuentro informal en la galería Elvira González -convertida de nuevo en improvisado gabinete de crisis- para acercar posturas de cara a la reunión que mantendrán con Ifema mañana. Poco ha trascendido de ese encuentro, aunque todo apunta a que los galeristas que integraban el comité en la última edición de ARCO presentarán su dimisión, como anunciábamos ayer en estas páginas.

Por parte española, el comité está formado por José Martínez Calvo, Pedro Carreras, Elvira González, Elba Benítez y Ángel Samblancat (que ayer se hallaba en China). Pep Benlloch, de Visor, ya había salido y, en su lugar, Ifema ha invitado a Juana de Aizpuru, ex directora de ARCO. Ésta aseguraba ayer a ABC que aún no ha aceptado entrar en el comité: «Dependerá de si Ifema acepta las condiciones que pusimos las galerías; yo vi muy receptivo al presidente en la última reunión. ARCO debe cambiar de rumbo, mejorar cosas, replantearse las dimensiones. No debe ser una feria tan grande». En cuanto a qué hará mañana si dimite el resto del comité, dice: «Es normal que si dimite la cabeza también lo hagan los demás, fueron propuestos por ella. Sé que no es el mejor momento para entrar, pero si hace falta, ahí estaré». Sobre el trabajo que ha llevado a cabo Lourdes Fernández no quiere entrar en valoraciones: «Ha trabajado con mucha ilusión e interés, pero ha vivido una época con muchos desencuentros, tensiones y presiones. Ha sido una época inestable».

Quien sí valoró la labor de Lourdes Fernández fue la ministra de Cultura. Y lo hizo muy positivamente: «Ha hecho un trabajo muy bueno al frente de la feria», informa Efe. Asimismo, destacó Ángeles González-Sinde el «criterio y sentido común» con el que Lourdes Fernández condujo la «situación difícil» que se dio en la última edición. Aunque aún no había hablado con ella, le manifiesta su apoyo y respeto, «si ha decidido dar otro rumbo a su carrera profesional. Su labor ha sido magnífica y es muy importante que ARCO siga existiendo con el mismo nivel de calidad y exigencia».

«Una gran profesional»

Por su parte, el director del Museo Reina Sofía, Manuel Borja-Villel, decía que Lourdes Fernández es «una gran profesional» y su renuncia, «una gran pérdida para ARCO». Cree que la feria «se tiene que repensar; lo primero es saber qué va a pasar».

Rosina Gómez-Baeza, que dirigió ARCO durante nada menos que veinte años, comentaba a ABC que le «entristece mucho todo lo ocurrido, Confío en que se llegue a un acuerdo que permita establecer la sintonía entre ambas partes. Creo en la voluntad de las galerías y de Ifema para reconducir la situación y superar los desencuentros». Gómez-Baeza afirma que ARCO «siempre ha sido y debe ser una feria de selección; hay que mantener esos criterios de calidad con estatutos similares a los del resto de ferias». Recuerda que ella misma también pasó momentos muy difíciles al frente de ARCO (en el 93), pero está convencida de que «ARCO superará este nuevo escollo. Hace falta esta feria; ARCO es una marca de valor, una cita necesaria». Sobre Lourdes Fernández, destaca que «es una persona que aporta mucho empeño. Gestionar una feria como ésta no es nada fácil».

Lourdes Fernández mantiene su silencio y continúan las especulaciones sobre su futuro. Hay quien lo ve cerca de su casa, concretamente en el Guggenheim bilbaíno -Juan Ignacio Vidarte está en la cuerda floja-. Otros creen que su puesto estará al frente de alguna nueva feria de arte -¿en Madrid, Barcelona, Bilbao?-, en la que recalarían las galerías que salgan de ARCO al no estar de acuerdo con la línea de Ifema.