Graves fallos estructurales del Casón del Buen Retiro pueden duplicar el coste de las obras
Los problemas de estructura del Casón del Buen Retiro, que obligaron a suspender las obras de ampliación hace ocho meses, aún no se han resuelto. La consolidación del Casón, bajo el que se construirán tres sótanos, es técnicamente posible sin necesidad de modificar los espacios diseñados en el plan de necesidades, pero a costa de duplicar su presupuesto inicial (2.200 millones) y con más de un año de retraso sobre lo previsto.
El pasado mes de abril, la Gerencia de Infraestructuras y Urbanismo del Ministerio de Cultura suspendió temporalmente las obras de ampliación del Casón del Buen Retiro debido a los problemas de estructura que presenta este edificio, bajo el que se van a construir tres plantas ... con una profundidad que supera los 18 metros. «Pensamos que era lo más conveniente -asegura a ABC Jesús Ruiz, secretario técnico de Infraestructuras- para poder estudiar a fondo las condiciones del Casón, que está en peor estado de conservación de lo previsto. Hasta que no se llevaron a cabo las primeras intervenciones no se pudo conocer el alcance de los problemas que presenta este edificio. No obstante, hasta ahora, se ha procedido, entre otras cosas, a la consolidación de los muros y forjados en el interior del edificio, al saneado de paramentos y al cosido de grietas. También se han instalado las pantallas laterales de contención del edificio. Especial atención han tenido los frescos de Lucas Jordán que adornan la cúpula del edificio».
CONSOLIDACIÓN DE LOS FRESCOS
La seguridad de esta bóveda y de las pinturas que alberga ha sido, en palabras de Ruiz, uno de los principales objetivos de este proyecto de ampliación. Lo primero que se ha hecho ha sido consolidar los frescos de Jordán que, a juicio de Gianluigi Colalucci -restaurador de la Capilla Sixtina y asesor del Prado en esta intervención- están en mal estado de conservación debido a las filtraciones de agua y a los diversos repintes y restauraciones, algunas de ellas mal hechas, que han sufrido. A esto hay que sumarle la aparición de pequeñas grietas que, aunque no afectan a la estructura arquitectónica de la cúpula, sí han alterado la capa de yeso sobre la que se sustentan las pinturas.
El pasado mes de octubre, la Gerencia de Infrestructuras recibió un voluminoso informe del Cedex -un organismo del Ministerio de Fomento especializado, entre otras cuestiones, en patología estructural y geotécnica y con quien Cultura tiene un acuerdo de colaboración-, en el que se pormenorizan los problemas estructurales de Casón.
«Lo que estamos haciendo ahora -explica Ruiz- es plasmar las conclusiones del Cedex en el documento técnico que soporta la obra. Estamos estudiando la mejor manera de llevar a cabo la ampliación, porque técnicamente se ofrecen varias posibilidades. También estamos estudiando el alcance económico que tendrá esta intervención.
-¿No será necesario variar el proyecto original de ampliación?
-No, técnicamente el proyecto se puede llevar a cabo sin necesidad de modificar los espacios diseñados en el plan de necesidades.
-¿Qué presupuesto tenía esta obra? ¿Podría duplicarse?
-El presupuesto era de 2.200 millones de pesetas. No cabe duda de que todos estos imprevistos lo van a encarecer sustancialmente. No sabemos cuánto, pero nos gustaría que el montante final no llegue a duplicarse.
-¿Cuándo se reanudarán las obras?
-Es difícil de decir porque estamos redefiniendo el proyecto y hay que montar una estructura que sea capaz de sostener el nuevo edificio. Quizá se podría empezar a trabajar de nuevo antes de verano y las obras durarían unos 20 meses.
PROBLEMAS EN INMUEBLES VECINOS
-¿Los imprevistos que han surgido hacen que la obra del Casón se excepcional?
-En modo alguno. Es cierto que han surgido algunos problemas pero esto suele suceder cuando se acometen intervenciones de este tipo. Por otra parte, el Casón es un edificio histórico por lo que no se puede intervenir en él a la ligera. De hecho, tan importante como el proyecto de ampliación van a ser los controles de seguridad que realizará el Cedex durante el tiempo que duren las obras.
El pasado 15 de noviembre, ABC publicó una información sobre cómo estaban afectando las obras del Casón a los inmuebles vecinos. Los vecinos del barrio de Los Jerónimos aseguraban que, debido a estas obras, han aparecido grietas en algunos inmuebles de la calle Felipe IV. Otro problema lo constituyen las aguas subterráneas que circulan bajo el Casón y que, según los vecinos, han sido desviadas a los edificios cercanos produciendo humedades.
«No sé nada sobre la aparición de grietas en los inmuebles vecinos -asegura Ruiz-: si se hubieran producido, imagino que el Casón se hubiera visto afectado en primer lugar y no ha sido así. En cuanto a las aguas subterráneas, sí hemos topado con tierra mojada o pequeñas filtraciones, pero no sé nada de que el agua haya manado a borbotones, ni de que se haya desviado afectando a otros inmuebles.
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