Estas son las 20 guitarras más caras de la historia

Supera así a la Fender Stratocaster usada por David Gilmour, de Pink Floyd , que fue vendida por cuatro millones de dólares en 2019 en una subasta de la casa Christies para obras de caridad. La «Black Strat» fue parte integral de la grabación de los álbumes más legendarios del grupo británico, como «The Dark Side Of The Moon» (1973), «Wish You Were Here» (1975), «Animals» (1977) y «The Wall» (1979). En la misma subasta se vendió por casi dos millones de dólares una Stratocaster blanca de 1954 con número de serie 0001 que se usó en la grabación de «Another Brick in the Wall pt.2», y una Martin D-35 utilizada en «Wish You Were Here» también por casi dos millones. En total, Gilmour recaudó 21.5 millones de dólares para la organización ClientEarth, que busca hacer imponer cambios legales para frenar el cambio climático.

La siguiente en la lista es otra Fender Stratocaster llamada «Reach out to Asia» , que fue firmada por Eric Clapton, Keith Richards, Mick Jagger, Ronnie Wood, Brian May, David Gilmour, Jimmy Page, Jeff Beck, Mark Knopfler, Pete Townshend, Tony Iommi, Angus Young, Malcolm Young, Sting, Ritchie Blackmore, Def Leppard, Bryan Adams, Liam Gallagher y Paul McCartney para ser vendida y recaudar fondos para las víctimas del tsunami del 2004. Se consiguieron 2,7 millones de dólares.

En tercer lugar tenemos esta Gibson J-160E electroacústica de 1962, que fue propiedad de John Lennon en la época de los Beatles. Se perdió durante una gira en 1963, y misteriosamente apareció décadas después en una tienda de San Diego. Con tal de tener la guitarra que parió «I Saw Her Standing There» o «She Loves You», alguien pagó 2,4 millones de dólares en una subasta, en 2014.

El magnate y filántropo Paul Allen compró la quinta más cara, que no es otra que la Fender Stratocaster que tocó Jimi Hendrix en el festival de Woodstock de 1969. Costó dos millones de dólares, y está exhibida en la Experience Music Project de Seattle.

Tras las dos guitarras de Gilmour que alcanzaron casi dos millones de dólares, antes mencionadas, en el octavo puesto iría esta guitarra Doug Irwin con un lobo pintado que perteneció a Jerry Garcia de The Grateful Dead , que no se lo pensó mucho y la bautizó «Wolf». En 2002 fue donada al Southern Poverty Law Center para que la subastara y recaudara fondos, y se vendió por 1,9 millones de dólares.

La siguiente guitarra está considerada un tesoro nacional por el Gobierno de Jamaica. En 1979 le construyeron una Washburn Custom a medida a Bob Marley , pero solo pudo usarla algo más de un año por el cáncer que contrajo y que finalmente acabó con su vida. Cuando vio que no podía seguir tocando se la regaló a su técnico de sonido Gary Carlsen, que años después la vendió por 1,2 millones de dólares a algún loco del reggae.

Sólo se fabricaron diez ejemplares de esta Gibson Korina Explorer en 1958, pero lo que hace única a esta obra de arte es que fue tocada por Slash, Kirk Hammett y Rick Nielsen antes de ser subastada por 1,1 millones de dólares.

Duane Allman usó esta Gibson Les Paul Goldtop de 1957 en los dos primeros discos de los Allman Brothers, y también fue utilizado en la grabación de «Loan Me a Dime» con Boz Scaggs, y en la de «Layla», el colosal hit de Derek & The Dominoes. En 1977, seis años después de su muerte, un comprador se hizo con la guitarra, la restauró y la conservó durante décadas, prestándola también para ser expuesta en el museo Allman Brothers Band The Big House, en Macon, estado de Georgia. Pero en agosto de 2019 un anónimo pagó por ella un millón de dólares.

¿Recuerda el debut de los Rolling Stones en el show de Ed Sullivan? Claro que no, pero seguro que si le gusta el rock'n'roll lo ha visto varias veces. Pues esta Les Paul de 1959 es la guitarra que tocó Keith Richards , aquel afortunado día de octubre de 1964. En 2003 fue subastada por un millón de dólares.

La Fender Stratocaster que Bob Dylan tocó en el Newport Folk Festival de 1965 . ¿Hacen falta presentaciones? Para los no iniciados, solo señalar que 965,000 dólares son hasta razonables si a cambio se posee el instrumento que protagonizó uno de los momentos más importantes de la historia de la música popular.

La historia de la siguiente guitarra es increíble: En una viaje a Texas, Eric Clapton compró seis Fender Stratocaster . Tres de ellas se las regaló a George Harrison, Pete Townshend y Steve Winwood, y las otras tres las desmontó para construir una súper guitarra: «Blackie» . Después de quince años tocándola en escenarios de todo el mundo, la subastó para recaudar fondos para el Crossroads Rehab Centre, la clínica de desintoxicación que fundó tras caer él mismo en el infierno de la heroína. Fue adquirida por 959.000 dólares.

A corta distancia, con 957.000 dólares, hay otra guitarra de Jerry Garcia , en este caso una Doug Irwin personalizada llamada «Tiger» , que usó entre 1979 y 1989. La compró el presidente de los Colts de Indianapolis en 2002.

En decimosexto lugar, tenemos de nuevo al señor «mano lenta». Clapton usó esta Gibson ES-335 de 1964 con los Yardbirds, Cream, Blind Faith y los Bluesbreakers del maestro John Mayall. Casi nada de historia, oiga. Alguien no pudo resistirse y pagó 847,500 dólares en una subasta de Christie's en 2004, lo que la convirtió en la tercer más cara del mundo en ese momento.

Otro «Unplugged» de MTV célebre sirve a Clapton para ostentar otra plaza más en este Top20. En su caso utilizó esta maravillosa CF Martin de 1939 , que vendió por 791.500 dólares para aportar otro granito de arena a su centro de rehabilitación.

Esta otra Fender Stratocaster fue comprada por Guitar Center en una subasta por 623,500 dólares , por una buena razón. Lenny, la mujer de Stevie Ray Vaughan , se la regaló al mágico hacha por su cumpleaños en 1965, y además de bautizarla con el nombre de ella, le puso las iniciales SRV y la usó hasta el día de su muerte, en un accidente de helicóptero en 1990.

Cerrando el Top20 de las guitarras más caras del mundo, tenemos la Fender Stratocaster Gold Leaf . Un músico ordenó que fabricaran una guitarra «digna de un museo» en 1996, con motivo del 50º aniversario de Fender, y la marca atendió su petición entregándole esta joya personalizada bañada en oro de 23 quilates, que más tarde sería subastada por 455.000 dólares. ¿Se imaginan quién era ese músico? Eric Clapton , que también ostenta el puesto número veinte con su Brownie Stratocaster , la que hizo sonar en «Layla».