Viggo Mortensen se alista en las filas del independentismo

La militancia de Mortensen en una organización clave en el entramado del «proces» y cuyo presidente, Jordi Cuixart , se encuentra en prisión preventiva, ha sorprendido e indignado a buena parte de sus seguidores. Sin embargo, no es la primera vez que se posiciona a favor de la independencia de Cataluña.

Aunque Viggo Mortensen nació en Nueva York y su vida ha transcurrido en Argentina, Dinamarca y Venezuela, desde 2009 está afincado en Madrid, donde reside junto a su actual pareja, la actriz barcelonesa Ariadna Gil (49), en un piso situado en la calle Barquillo, en el barrio de Las Salesas. Alérgicos a los flashes, ajenos a los grandes eventos sociales, Mortensen y Gil sí se dejan ver con cierta frecuencia paseando por las calles más céntricas de la capital, del barrio de Chueca a la plaza de Oriente; o departiendo con amigos como Christina Rosenvinge o el propio Díaz Yanes. Amante de cachivaches antiguos, considerado por sus vecinos como un tipo discreto, algo hosco y habitualmente desaliñado, Viggo Mortensen se esfuerza por pasar desapercibido. Pero cuando habla de política, no se corta.

En 2015, mientras promocionaba «Lejos de los hombres», afirmó a Europa Press que al llegar a Cataluña, «viendo la televisión en el hotel», se dio cuenta de que «cada canal parecía un cuento completamente diferente», lo que le llevó a pensar que era un peligro «no escuchar al otro» . Tanto empatizó con la causa independentista que el año pasado engrosó la lista de las 50 personalidades de diferentes ámbitos que firmaron el manifiesto « Let catalans vote » («Dejad votar a los catalanes»). Una rúbrica que a buen seguro aplaudió el padre de Ariadna, August Gil Matamala, conocido abogado que ha figurado en diversas ocasiones en las listas electorales de la CUP .

Fue en 2006 cuando conoció a Ariadna Gil durante el rodaje de «Alatriste». Por aquel entonces, ella estaba casada con el director de cine y guionista David Trueba , con quien tuvo dos hijos, Violeta y Leo. Se reencontraron, más tarde, durante la filmación de «Appaloosa», un western crepuscular escrito y dirigido por Ed Harris. Entonces se certificó el flechazo. Tal fue su enamoramiento, que la actriz catalana abandonó a Trueba.

Mortensen resulta un personaje enigmático y profundamente contradictorio. Es una estrella de Hollywood, aunque se resiste a cumplir como tal. Pretende ser discreto, pero en cuestiones políticas no se queda al margen. Se ha declarado forofo del Real Madrid -eso sí, después del San Lorenzo de sus amores, el club favorito del Papa Francisco- y, sin embargo, Leo Messi le va más que Cristiano Ronaldo. Aunque reconoce que le gusta vivir en España, su país de adopción desde hace casi una década, ve con buenos ojos la independencia de Cataluña. Y ayer lo dejó bien claro.