¿Qué fue de Rafa «Balita» Lozano?

Porque Lozano puede considerarse como el primer deportista de elite cordobés. Al menos, en lo que respecta al apartado internacional, puesto que sus grandes logros le vinieron en las citas olímpicas de Barcelona, Atlanta y Sidney, en las que consiguió un diploma olímpico, un bronce y una plata. Además, cosechó éxitos en campeonatos europeos y mundiales.

Sin embargo, ese camino amateur se le acabó en 2001 cuando decidió pasar a profesionales. En ese complejo mundo, tuvo la dificultad añadida de estar en el peso mínimo, en el que la posibilidad de realizar combates era menor en Europa y eso le complicó la carrera hacia la disputa de títulos.

Realizó uno en Córdoba ante el nicargüense Fajardo en abril de 2003 por un cetro del «Mundo Latino» y perdió, al igual que un nacional mini-mosca frente Zemmouri en junio de 2004 en Leganés.

Lozano siguió con su carrera hasta que le salió otra gran oportunidad en diciembre de 2006: un intercontinental contra Brahim Asloum, quien le arrebató el oro en Sidney, en París. Y ahí el galo le venció por ko técnico en el cuarto asalto.

Tras ese combate, Lozano decidió acelerar su retirada. Y llegó ese 17 de febrero de 2007 en Vista Alegre, donde se enfrentó Dragutescu, el rival que más veces tuvo delante como profesional.

Lozano no iba a estar apartado de los cuadriláteros, pero como entrenador. Sin embargo, un año después volvió a escena para seguir compitiendo, algo que componía parte de su vida.

Y realizó un total de siete combates más. Todos con victoria que debía sumar a su récord anterior de 18-3-0. Pero a Lozano le faltaba algo y lo consiguió el 13 de noviembre de 2010, cuando se impuso a Jordi Gallart en el combate por el título nacional mini-mosca, que estaba vacante, en Fuente obejuna. Entonces, sí colgó los guantes de manera definitiva.

A partir de ese momento, Lozano empezó a colaborar como técnico con el Comité Olímpico Español y con la Federación Española de boxeo, en la que fue progresando hasta llegar al título de seleccionador nacional. Ahora Rafa «Balita» Lozano es quien busca un heredero que vuelva a llevar al boxeo español amateur a sus mayores cotas de gloria. La suyas.