Science se hace eco de las «nubes negras» sobre la ciencia española

El artículo lo firman Luis Santamaría , presidente de la Asociación para el Avance de la Ciencia y la Tecnología en España e investigador del Instituto Mediterráneo de Estudios Avanzados; Fernando Valladares , presidente de la Asociación Española de Ecología Terrestre y científico del Museo Nacional de Ciencias Naturales, y Mario Díaz , presidente del Comité Científico de la Sociedad Española de Ornitología e investigador en el mismo museo que Valladares.

En el artículo, los autores hacen mención a la Estrategia Española de Ciencia, Tecnología y de Innovación y el Plan Estatal de Investigación Científica y Técnica, aprobados en febrero por el Gobierno. A juicio de estos investigadores, estos documentos y las políticas del Gobierno se centran en "podar" el sistema español de I+D+i y redirigir los fondos públicos hacia la investigación privada, basada en objetivos empresariales.

Un aumento de los fondos destinados a la I+D privada pueden ser "bienvenidos", según los firmantes, que, sin embargo, advierten de que basar éste en la reducción de los fondos destinados a la I+D pública puede revertir negativamente en el esfuerzo por mantener la investigación básica , sobre la que se construye la innovación.

En este sentido, lamentan que en 2012 el 59 % del presupuesto estatal destinado a I+D fuera asignado al capítulo financiero (créditos) y recuerdan que buena parte de esta partida no fue ejecutada.

«Falta de meritocracia»

En lugar de crear una equivocada división entre lo público y lo privado, entre la investigación básica y la innovación, las políticas públicas deberían abordar cuestiones que limitan la mejora de ambas, opinan. Entre ellas, apuntan, una reducción de los trámites burocráticos necesarios para obtener fondos de I+D+i, medidas para corregir "la falta de meritocracia en el sistema de recursos humanos" y dar un mayor apoyo institucional a la internacionalización de la ciencia.

Los autores, que denuncian asimismo la falta de cultura innovadora de la mayoría de las empresas, alertan del crecimiento de las economías emergentes, que están aumentado su inversión en I+D a un ritmo muy superior al de España.

Esto, añaden, puede perjudicar a España si no se cambian las políticas: "será cada vez más duro para España alcanzar esa velocidad, sobre todo después del parón de estos años".

Una de las consecuencias de los recortes es la salida de muchos investigadores jóvenes, indican. "Los políticos deberían aprovechar el enorme empujón que ha experimentado en la última década la calidad de la I+D y mitigar así la sangría de la pérdida de talento joven fuera de España", subrayan.