Los abortos en niñas canarias menores de 15 años crecen cerca de un 23% en 2011

Por tramos de edad, el año pasado se produjeron 22 interrupciones voluntarias del embarazo en niñas menores de 15 de años y 17 en los años 2010 y 2009, respectivamente, lo que supone un repunte del 22,7% en volumen de abortos practicados en 2011 en relación al 2010.

Entre adolescentes con edades comprendidas entre los 15 y 19 años, se registró también un considerable aumento, 721 interrupciones, frente a las 549 de 2010 y las 562 de 2009.

Cabe recordar que en el segundo semestre de 2010 comenzó a aplicarse la Ley Orgánica 2/2010 de 3 de marzo, de salud sexual y reproductiva y de la interrupción voluntaria del embarazo que permitió a las chicas menores de edad abortar sin el consentimiento de sus padres a quienes, no obstante, debía informar (a alguno de los dos) siempre y cuando no concurriera el eximente de "grave conflicto" para la joven.

En la estadística de Sanidad, se señala que en 2010, antes de la entrada en vigor de la Ley 2/2010 abortaron 2.226 mujeres y después de su aplicación, 2.710.

Sobre los motivos que inducen a una mujer a abortar, la Asociación de Clínicas Acreditadas para la Interrupción del Embarazo (Acai) estima en su último estudio de junio que el aborto provocado no está vinculado a mujeres sin formación o sin empleo. El 65% de las mujeres que abortan tienen estudios entre la Secundaria y el Bachillerato (o equivalentes); y más del 40% de las mujeres están trabajando en el momento de la interrupción, siendo un 14% las que están estudiando.

Además, el 48,47% de las mujeres encuestadas para el estudio abortarían en cualquier circunstancia, el 8,8% por razones de edad, motivo incambiable, y por patología fetal o materna un 5,08%. La suma de estos porcentajes muestra que un 62,35% de las mujeres que abortan lo hacen por causas que no tienen un origen ni económico, ni laboral ni afectivo.

Frente a ese 62,35%, un 30,2% interrumpen su gestación por causas económicas y laborales, siendo tan sólo un 6,79% las que abortan por razones afectivas o falta de apoyo en el entorno familiar. De hecho, el 42,5 % de las mujeres encuestadas se encuentra trabajando en el momento de la interrupción, seguidas de un 35% que se encuentra desempleada.

A tenor de las respuestas dadas, el estudio concluye que las mujeres consideran que no es suficiente contar con un puesto de trabajo a la hora de plantearse la continuidad del embarazo. En este sentido, decuce que las mujeres valoran que para mejorar efectivamente su situación económica-laboral resultaría necesario mejorar sus condiciones laborales, los planes de conciliación familiar, los instrumentos de apoyo en la red escolar, las ayudas económicas por hijo, entre otros.

La Consejería canaria de Sanidad matiza que "el seguimiento y evaluación" de las IVEs en España se lleva a cabo por el Ministerio de Sanidad, Servicios sociales e Igualdad, a través de "un sistema de vigilancia epidemiológica que recibe información de todo el Estado".

Cada año, una vez que los datos recogidos son contrastados, tabulados y analizados, el Ministerio elabora una publicación anual con las estadísticas correspondientes referidas a todo el Estado y facilita a cada Comunidad Autónoma información sobre las IVE de mujeres residentes en su comunidad que han abortado fuera de la región.