Irán y Azerbaiyán chocan por Eurovisión

El intercambio de pullas, que por ahora se queda en el portazo diplomático, deja entrever una rivalidad más profunda entre las dos naciones de mayoría musulmana chií, que viene de lejos. Irán acusa a Azerbaiyán de relajamiento en las costumbres musulmanas y de mantener una excelente relación con Israel . Por otro lado, el apoyo del régimen de Teherán es una de las claves de la supervivencia del pequeño Estado cristiano de Armenia , enemigo acérrimo de Azerbaiyán por sus disputas en torno al enclave de Nagorno-Karabaj.

Hace semanas, una de las autoridades clericales más prominentes del régimen iraní, el ayatolá Sobhani , delaró a la agencia semioficial Fars que había llegado a sus oídos «la intención de Azerbaiyán de acoger el festival de la canción de Eurovisión y de organizar un desfile gay en paralelo».

Poco después, centenares de azeríes salieron a las calles de Baku para protestar contra Irán con carteles en los que, junto a imágenes de Ahmadineyad y del Líder Supremo, Jamenei , se podía leer: «Azerbaiyán no tiene necesidad de clérigos homosexuales».

La disputa fue creciendo en grados y suscitó una insidiosa propaganda, que cristalizó la semana pasada en ataques de «hackers» -apodados a sí mismos «Cibernautas por la libertad» - que llenaron las páginas web de Eurovisión con mensajes en los que se instaba a Azerbaiyán a «no acoger el festival de los gais». Muchos habitantes de Baku recibieron en sus buzones vídeos en los que se acusaba al gobierno azerí de promocionar la causa gay y de atacar valores musulmanes como el velo femenino en las escuelas.

Baku obtuvo el año pasado en Alemania el derecho a organizar este año el festival televisivo, y ve el evento como una gran oportunidad para promocionar el país en el mercado europeo.