Sesenta años no es nada

Isabel II sería coronada más tarde, el 2 de junio de aquel año. Sesenta años después, y en pleno año olímpico , los británicos se disponen para celebrar las bodas de diamante de su soberana con el cariño respetuoso de siempre, aderezado esta vez con algún exceso en forma, por ejemplo, de desfile naval por el Támesis , con la reina desfilando en una gabarra incluido.

El primer fin de semana de junio concentrará las principales celebraciones, con almuerzos al aire libre, un desfile de carrozas por toda la ciudad el domingo 3 o una misa en la catedral de San Pablo el martes 5. Pero el plato fuerte será, sin duda, el desfile por el Támesis, entre Putney y el Puente de Londres, en el que se espera que participen 1.000 embarcaciones , con las campanas de la ciudad repicando. La Reina participará en una «gabarra real» acondicionada para la ocasión.

Los miembros de la Familia Real llevaran las celebraciones a los otros 15 países donde Isabel II es jefa de Estado, mientras que el Victoria and Albert Museum o la National Portrait Gallery tienen programadas exposiciones con retratos de la homenajeada.