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Costa Concordia, el crucero de ensueño que hundió Schettino

Vino, una chica y nuevas mentiras. A medida que se conocen datos del naufragio de Giglio, la redención del capitán canalla resulta más improbable

Costa Concordia, el crucero de ensueño que hundió Schettino EDUARDO S. MOLANO

ÁNGEL GÓMEZ FUENTES

Un gran mujeriego, como el 90 por ciento de los capitanes de los grandes cruceros». Así define a Francesco Schettino , de 46 años, capitán del Costa Concordia, el ilusionista Francesco Tesei, quien conoce bien ese ambiente por haberse exhibido durante años en las ... grandes naves de Costa Cruceros, viajando también con quien hoy es el capitán más denostado de Italia. «Es un napolitano simpático y superficial», añade Tesei. Uno de sus oficiales, Martino Pellegrino, lo describe como un «autoritario, egocéntrico y temerario» , al que le gusta guiar la nave como si fuera un Ferrari. Y el presidente y consejero delegado de su compañía, Pier Luigi Foschi, lo considera «uno al que le gusta aparentar». Desde el primer momento, todas las culpas del naufragio, que ha causado 12 víctimas mortales y 20 desaparecidos, cayeron en el capitán Francesco Schettino: se acercó demasiado a la costa, iba a una velocidad excesiva (más de 15 nudos) y dio la orden de evacuación 68 minutos después de chocar contra un escollo, aunque sabía desde el principio que la sala de máquinas estaba inundada de agua. Después, para justificar su escapada y abandono de la nave, lo que está castigado con doce años de cárcel, dio una increíble versión: «No quería huir, caí por accidente en el bote salvavidas» , el mismo en el que se encontraban también su segundo y su tercer oficiales. ¡Oh, casualidad! Ante ese comportamiento, todo el mundo se ha hecho la misma pregunta: ¿estaba borracho o drogado Frascesco Schettino? El número uno de la naviera responde que «estaba alterado emotivamente; veía a su criatura, la nave, hundirse delante de él».

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