Un sondeo del PSPV vaticina otra debacle con la pérdida de seis escaños
Ferraz, molesta con Alarte por desaparecer tras conocer los datos
D. MARTÍNEZ
La cita con las urnas del próximo 20 de noviembre dibuja un negro panorama para los socialistas en la Comunidad. Según el último sondeo sobre intención de voto elaborado en la región para consumo interno del PSOE, los socialistas podría perder hasta seis escaños en ... las tres circunscripciones valencianas.
Así lo refleja una encuesta encargada por el comité electoral del PSPV, y realizada durante el pasado mes de julio. El trabajo de campo, consistente en 1.000 entrevistas telefónicas, empezó antes de que el ex jefe del Consell Francisco Camps presentase su dimisión y fuese relevado por Alberto Fabra. El resultado, según fuentes del partido, es «peor de lo que se esperaba».
Tanto, que incluso algunos referentes del PSOE que parecían llamados a liderar las candidaturas del puño y la rosa en la Comunidad están empezando a valorar la posibilidad de renunciar. Sería el caso de la secretaria de Infraestructuras y, sobre el papel, presumible cabeza de lista por Valencia, Inmaculada Rodríguez-Piñero. Según las mismas fuentes, Rodríguez-Piñero medita aducir «motivos personales» para descolgarse del proyecto de Rubalcaba.
Compromís, al alza
La pérdida de escaños del PSOE en la Comunidad beneficiaría directamente al PP, pero también a la coalición nacionalista Compromís. Según los resultados de la encuesta socialista, la formación —que se convirtió contra pronóstico en la tercera fuerza en las Cortes el 22-M— podría lograr hasta tres escaños, en el mejor de los casos, entre Alicante y Valencia.
De esta forma, los socialistas valencianos pasarían de los 14 escaños que ocupan en la actualidad a ocho, en el peor de los escenarios. Según el sondeo, el PSPV perdería entre dos y tres escaños en la provincia de Valencia, donde el PP se situaría en una horquilla entre 10 y 11 asientos, frente a los nueve actuales. Compromís obtendría entre uno y dos.
En Alicante, los socialistas también retrocederían: pasarían de los cinco diputados que mantienen en la actualidad a una horquilla de entre tres y cuatro —lo que complica seriamente la elaboración de la candidatura, dadas las disputas por ocupar los puestos de salida—. Por su parte, el PP ganaría entre uno y dos escaños sobre los siete actuales. Y, en función del resultado del PSOE, Compromís podría adjudicarse un asiento.
En cuanto a la provincia de Castellón, el reparto definitivo de escaños puede estar en un puñado de papeletas. El PP podría sumar un diputado a los cuatro con los que cuenta en la actualidad, en detrimento del PSOE. Los socialistas se quedarían así con un único representante por la provincia castellonense —en principio, su coordinador electoral, Ximo Puig, que será cabeza de lista—, frente a los dos actuales.
Alarte, desaparecido
Los datos del sondeo ya están sobre la mesa de la dirección federal del PSOE. En Ferraz, según fuentes del partido, ha causado un profundo malestar la actitud del secretario general del PSPV, desaparecido durante buena parte del mes de agosto. La cúpula socialista no entiende que el secretario del PSPV se haya permitido ausentarse tres semanas tras conocer la demoledora encuesta.
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