«Yo no voy a tapar agujeros... ¡Ahora los voy a hacer!»

De cualquier modo, en Caldes saben bien qué es que el azar les sitúe en el mapa. Rosa Viaplana es la propietaria de la administración número 1 del pueblo, Les Tremes. Es la «reina Midas» que ha vendido este año 193 series con el número de oro, pero que también repartió un cuarto premio de Navidad hace años. Además, el pasado abril, de allí también salieron 6 millones de euros de una Primitiva. Y eso que el despacho está en el número 13 de la avenida de Pi i Margall, para que luego hablen de números cenizos.

Y, si no, que le pregunten a los trabajadores que se quedaron en la calle poco después de que su empresa cerrara. «Me han llamado. Estaban muy contentos, porque iban a ser unas Navidades muy duras», explicó Viaplana a Ep. O la vecina del pueblo que ahora dice que adquirió un décimo del 25506 con más amigas porque soñó con él. Sofía, de 28 años y en tratamiento contra el cáncer, tiene claro a quién dedicará su porción de buena suerte: a sus tres hijos pequeños. La misma cifra mágica de cinco números llevó 400.000 euros en las otras dos series a Priego de Córdoba y Gijón.

Algunos millones son los que el 57896, el otro cuarto premio, desperdigó por el barrio de Gracia, en Barcelona. La peluquera Susana Campos lo tiene claro: «Yo no voy a tapar agujeros... ¡Los voy a hacer!», aseguraba al saber que tenía 40.000 euros más en la «butxaca». La dueña, María Sánchez, los 45.000 euros que le han tocado los dedicará a reformar el negocio...

La que se quedó a medio reformar, mejor dicho su pelo, es una clienta con la que estaban en plena faena cuando a las 10.17 la televisión escupía la noticia. Entonces, aquello se convirtió en un ir y venir de pasteles, pastas, descorches de botellas de cava... La jornada laboral duró bien poco, la verdad. Cerca de allí, en Hospitalet, el mismo número dejó 200.000 euros, repartidos en la ventanilla de una administración de la calle de la Iglesia.

La misma cantidad llovió en Navalmoral de la Mata (Cáceres), en Toledo, en Granada y en el distrito madrileño de Ciudad Lineal. «Ayer mismo por el martes, tuve dos décimos en la mano y los puse a la venta», explicaba a Efe Marcos Maza, uno de los empleados de la administración madrileña, donde algunos de los agraciados del barrio obrero y multicultural de Pueblo Nuevo aún no se habían enterado de su buena suerte al estar trabajando.

Quienes sí estaban al tanto de lo que ocurría eran muchos de los socios que adquirieron las 1.200 participaciones de la peña del Real Madrid de La Solana, en Ciudad Real. La localidad manchega se embolsó 24,8 millones de este cuarto premio.