TÚNEL DEL AVE, EL MUNDO AL REVÉS

Es como el mundo al revés, ya que por el contrario Jordi Hereu se ha convertido desde su llegada a la alcaldía en el gran defensor de esta obra, cuando su predecesor, Joan Clos, se desgañitó predicando en el desierto defiendo la opción del litoral, que incluía una estación en el aeropuerto de El Prat que garantizaba la intermodalidad de la alta velocidad con el transporte aéreo, hasta que tuvo que ceder y firmar el túnel de Mallorca, que Hereu asumió, negándose a reabrir un debate que no hacía más que posponer una infraestructura altamente estratégica para Catalunya. Los que no asumen lo que firmaron son ahora populares y nacionalistas. ¿Cómo puede ser que un túnel se convierta en una pugna ideológica?

Joan Clos, que casi tuvo que dejar el Ayuntamiento de Barcelona por la puerta de atrás, se merece, pese a sus errores, ser rehabilitado por la historia. Tenía una indudable ambición por la ciudad, y puso las bases para atraer, entre otras, las industrias aeronáutica y biomédica, y su apuesta porque el trayecto troncal del AVE incluyera una estación en el aeropuerto no fue escuchada ni atendida, no sólo por sus rivales políticos, sino también desde dentro del propio partido socialista.

Clos, además, se movía como pez en el agua en el ambiente de las organizaciones internacionales de gobiernos locales, lo que aprovechaba para atraer inversiones. Por cierto, todo indica que en un futuro próximo dejará la embajada en Turquía para ponerse al frente de Habitat, la agencia de las Naciones Unidas para los asentamientos humanos.

La estación del AVE de El Prat era quizá la más estratégica, incluso por encima de la estación de la Sagrera,

cuya primera piedra se ha puesto también esta semana. Habría sido una pieza clave en la vocación del aeropuerto por convertirse en un potente hub del sur de Europa, pues era el medio para aportar miles de pasajeros, desde Zaragoza, hasta el sur de Francia. No fue así, entre otras cosas porque, como reconoció un ministro del PP de la época, no podía ser que el aeropuerto de Barcelona tuviera estación del AVE cuando Barajas no la tenía.