Dieciséis pequeños pueblos donde la Navidad se celebra de una forma única y sorprendente

Belén de los oficios perdidos. 23, 26 y 30 diciembre y 7 y 13 enero. La primera edición se celebró en 1983. Los figurantes salen del castillo, del siglo XII, y forman unas treinta escenas donde están representados los antiguos oficios medievales (boteros, carreteros, albarderos…) hasta llegar al pesebre.

Procesión de las gavillas. 24 diciembre. Tras la Misa del gallo, todo el pueblo, con gavillas encendidas formando antorchas, recorre las calles hasta la plaza donde se prende una gran hoguera que luego se salta mientras se cantan villancicos.

Belén viviente. 23 y 30 diciembre. Este pueblo de la Sierra Norte (750 habitantes) se 'arregla' estos días como si fuera el pueblo de Belén. Con las luces apagadas se representan diversas escenas, iluminadas solo con antorchas, hasta llegar a la plaza del Ayuntamiento donde está el Niño recién nacido.

Ronda de Pastores. El sábado anterior a Nochebuena, más de cien zambomberos anuncian la Navidad vestidos con trajes típicos y tocando antiguos instrumentos: almirez, calderillos, sartenes y zambombas. Esta tradición se ha ido extendiendo por los pueblos de alrededor, pero ellos fueron los primeros.

Cofradía del Niño Dios. 24 y 25 de diciembre. La tradición se remonta a mediados del siglo XVII y solo pueden participar treinta y tres cofrades (en alusión a la edad de Cristo). Serafín Portillo Blanco, secretario de la Cofradía del Niño Dios, explica que esta Cofradía data del año 1662. «Entre las actividades que se llevan a cabo durante la Navidad, el día de Nochebuena a las 22.00 h tienen lugar Las Rajas, que representan a los pastores anunciando la venida del Mesías. Los cofrades ataviados con capa española de paño negra, y con grandes castañuelas y tamboril (caja) recorren las calles del pueblo en compañía de los vecinos, y en cada casa de cada cofrade se cantan villancicos exclusivos de la Cofradía». El día de Navidad -con 'el carantolla' y velones- los cofrades acompañan a la cuna en la que va el Niño.

Retablo de los Ángeles. Es tradición muy antigua. El 24 de diciembre. salen dos arcángeles y dos ángeles (con la cara pintada de blanco), el demonio (de negro) y un mochilero, y visitan las casas del pueblo para anunciar el nacimiento de Jesús. El demonio es vencido y el mochilero recibe el aguinaldo.

Carnavalcázar: Carnaval de invierno. Del 25 al 28 de diciembre. Desde 1813 se celebra en estas fechas. Hay desfile de comparsas, máscaras y entierro de la sardina el último día. Los vecinos visten de luto acompañando al pescado que va en carroza y es quemado, junto a los peleles que han estado colgados de los balcones. Fiesta de Interés Turístico Nacional.

El Zangarrón. 26 de diciembre. Es una mascarada de invierno cuyo antecedente quizá esté en las saturnales romanas que la Iglesia acabó sustituyendo. Un personaje cubierto con manta a cuadros, terrorífica máscara y vejigas con las que golpea a la gente, intenta proteger al santo que se celebra este día (San Esteban).

Fiesta de las Ánimas. 28 de diciembre. El llamado 'Animero Mayor' recorre las calles de este pequeño lugar (unos 500 vecinos) con un calcetín de lana recogiendo limosnas y dando a besar un crucifijo. Con lo obtenido se pagaban misas para sacar a las ánimas del Purgatorio, y así se sigue haciendo. La tradición se remonta a varios siglos y era una forma de que las ánimas dejaran tranquilos a los vivos en estas fechas navideñas.

El Ánima Muda. 28 diciembre. De madrugada un personaje (hombre o mujer), vestido completamente de blanco y con una gran alforja recorre todo el pueblo tocando una campanilla. Su identidad tiene que mantenerse en secreto. Debió ser en un principio ritual de invierno, que acabo en el Día de los Santos Inocentes para recordar a los niños 'sin voz' que supuestamente ordenó asesinar Herodes.

Danza de los Locos. 28 diciembre. Danzas únicas de origen incierto, seguramente traídas de Centroeuropa cuando la fundación en el siglo XVIII de los poblados de colonización. Estuvo a punto de desaparecer y se recuperó en 1982. El personaje central es 'La Loquilla', acompañada de escopeteros que recitan curiosos versos y danzantes con vestidos de volantes y abalorios.

Els Enfarinats. 28 diciembre. Con motivo del Día de los Inocentes un nuevo gobierno se hace cargo cada año del Ayuntamiento y se organiza una multitudinaria batalla con miles de petardos, lanzamiento de huevos y -sobre todo- de harina, con la que se embadurnan todos los presentes. En Els Enfarinats, los insurgentes consiguen por un día rendir a la población bajo su mandato.

Fiesta del Pi. 30 diciembre. Se celebra en honor de Santa Coloma, aunque es claramente un ritual pagano. Se disparan trabucos, que en teoría debían ser para ahuyentar a los espíritus malignos, aunque Coloma -curiosamente- significa paloma y es símbolo de la paz. Un par de bueyes arrastran desde el monte un enorme pino que se introduce en la iglesia y se sujeta al techo haciéndolo girar.

Betlem de Tirisiti. Una muestra singular del teatro popular de marionetas de varilla. Todos los días desde el 23 diciembre al 6 de enero. El Betlem de Tirisiti que actualmente conocemos proviene de la fusión, a finales del siglo XIX, de los tres belenes que se representaban todos los años, animados por tres pequeñas empresas familiares. El 5 de enero suben los pajes regalos a los balcones. En Alcoy se celebra la cabalgata de Reyes más antigua de España.

San Lorenzo de El Escorial, Madrid. El Heraldo y la Estrella. El pueblo recibe el 3 de enero la Estrella de la Ilusión y al Heraldo Real, que anuncian la llegada de los Reyes Magos. La comitiva recoge llaves de las casas, para que Sus Majestades puedan llevar los regalos.

Auto del Misterio. 6 enero por la mañana. Solo quedan seis en toda España y se hace al aire libre. Son nueve escenas, destacando el episodio de Herodes en el balcón y la ofrenda de corderitos y ofrendas al Niño por parte de los pastorcillos.