La presa más alta de España (y otros cinco saltos de agua en la cuenca del Duero)
El invierno de nieve y lluvia llenará muchos embalses en España. Esta ruta recorre el de La Almendra, en Salamanca, y los llamados «Saltos del Duero»
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Iniciar sesiónEl mes de nieve y agua que termina ha dejado una declaración de zonas catastróficas y muchos paisajes escalofriantes (en todos los sentidos). Desde el punto de vista del campo y el turismo, en función de las posibilidades de la pandemia, se aventura ... una primavera verde y luminosa, con cascadas abundantes , cauces alegres y embalses a rebosar. Una ruta por cualquiera de esos escenarios podría aliviar estos meses de encierro y malas noticias, de túneles sin luz.
Como aperitivo de las posibilidades que ofrecerá la naturaleza este año, recordamos aquí una ruta peculiar, mezcla de ingenio humano y esplendor natural . Pasa por la presa más alta de España (casi parece un rascacielos) y por los saltos de agua unidos por la etiqueta «Saltos del Duero» , según se llamó al proyecto impulsado en 1918 para el aprovechamiento hidroeléctrico del río Duero en la frontera con Portugal.
La presa de La Almendra (Salamanca) -conocida también como Salto de Villarino - es la más alta de España, 202 m, y la tercera más grande en volumen de agua, tras las de La Serena y Alcántara. Se trata de una presa de tipo bóveda levantada sobre el cauce del río Tormes poco antes de su encuentro con el Duero. Se dice que en su construcción (1964-1970) se utilizaron más de dos millones de metros cúbicos de hormigón. Tiene una capacidad para embalsar 2.649 hm3 de agua, un muro de 3.036 metros y una superficie máxima de 8.650 hectáreas. Además del embalse, la obra incluye un túnel excavado en roca de 15 kilómetros de longitud que lleva el agua hasta la central subterránea de Villarino de los Aires.
Los seis saltos del Duero
En Castilla y León, el Duero recorre más de 700 kilómetros. El último tramo, entre Salamanca y Zamora , fue el lugar elegido para crear varios saltos de agua y centrales hidroeléctricas, los llamados «Saltos del Duero»: Aldeadávila y Saucelle sobre el río Duero y el salto de Villarino sobre el Tormes, en la provincia de Salamanca, y los saltos de Ricobayo, sobre el río Esla, y Villalcampo y Castro sobre el río Duero, en Zamora.
En Villarino comienza el Parque Natural de Arribes del Duero , con infinidad de opciones turísticas. En Pereña de la Ribera, por ejemplo, está la cascada Pozo de los Humos , con unos 50 metros de caída. Y la ruta aquí reseñada, desde luego, debería pasar por los seis saltos citados, rodeados de un impresionante paisaje de pendientes escarpadas y agua. Hay quien los llama «los fiordos españoles».
El Mirador del Salto (Saucelle) , con vistas sobre el antiguo poblado de Iberduero, se construyó para que viviesen los trabajadores de la presa, hoy transformado en un complejo turístico (Aldeaduero) con 26 casas de alquiler completo y una hospedería con 17 habitaciones. El salto de Aldeadávila puede verse desde el Mirador del Fraile , en un cañón sobrevolado por buitres, águilas y cigüeñas. Ricobayo fue el primer gran embalse construido en España (1929-1935), proyectado por J. Orbegozo Gorostegui. Muy cerca está la ermita del Cristo de San Esteban . Y en esta ruta aún nos quedaría pasar por los saltos de Villalcampo (1949) y El Castro (1952). Cerca, otra parada especial: el puente de Requejo o Puente Pino , inaugurado en 1914. En su época fue el de mayor luz (120 m.) y el de mayor altura (90 m.) sobre un río en España.
Una curiosidad más. Sobre el embalse de Ricobayo está -entre otros- un puente que merece una mirada detenida: el viaducto de Martín Gil , de 192 metros de luz libre y 210 de luz teórica, construido para el paso del tren entre 1934 y 1942 y que al inaugurarse ostentó durante poco tiempo un récord mundial: el puente de mayor arco del mundo de hormigón armado.
Fue una de las obras de ingeniería más audaces en España, cuyo nombre recuerda al ingeniero Francisco Martín Gil, redactor del proyecto de construcción. Las obras del arco concluyeron en octubre 1942 y el viaducto fue inaugurado al año siguiente, el 18 de abril de 1943, con el objetivo de que la línea ferroviaria entre Zamora y Orense salvara el embalse de Ricobayo sobre el río Esla. Sin embargo, no tuvo uso efectivo hasta nueve años después, ya que la línea férrea entre Zamora y Puebla de Sanabria se puso en servicio en 1952.
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