El abogado de Gicaman rebate los argumentos de Sánchez-Horneros

«Punto por punto y con todo tipo de argumentos». Así, según fuentes sanitarias consultadas por ABC, rebatió ayer el abogado de la empresa pública Gicaman, promotora del hospital del Polígono, los postulados de la empresa TASH durante la toma de declaraciones realizada por el titular del Juzgado número 3 de Toledo en el litigio que mantiene el citado taller de arquitectos con la Consejería de Fomento por la rescisión del contrato en 2012.

El taller de arquitectura Sánchez-Horneros ejerció la dirección facultativa de las obras del nuevo hospital de Toledo y considera que fue objeto de un despido improcedente después de que el Gobierno regional decidiera paralizar la obra y comenzar otro proceso constructivo y licitador. Precisamente, el proceso de contratación del nuevo hospital fue paralizado la semana pasada tras el recurso presentado por esta empresa ante el Tribunal Administrativo Central de Recursos Contractuales, dependiente del Ministerio de Hacienda, a solo unos días de finalizar el plazo de presentación de ofertas, el 30 de septiembre.

TASH pide a la Junta 3 millones de euros de indemnización por la «rescisión unilateral» de contrato, así como el pago de los perjuicios causados por la decisión de rescindir la relación contractual. Al recurrente ya le fueron denegadas por el juzgado de instrucción en mayo de 2013 medidas cautelares, y lo mismo hizo la Audiencia Provincial de Toledo en febrero de 2014.