Reproducir sensaciones en entornos virtuales, la gran revolución del futuro del videojuego y del metaverso

Razer, empresa conocida por su trabajo en el desarrollo de todo tipo de periféricos 'gaming', también apuesta con decisión por esta tecnología. La empresa lanzó recientemente al mercado los Kaira Pro Hyperspeed, unos auriculares de tipo diadema, pensados para PlayStation 5, que aprovechan el sonido del videojuego para generar una vibración y, de este modo, sumergir al usuario en el título al que esté jugando. Todo gracias a sus gatillos adaptativos, que son, sin duda, una de las mejores novedades que han recibido los jugadores durante la presente generación de consolas.

ABC ha pasado meses probando el dispositivo, que ofrece un gran sonido y una latencia bajísima. Por ejemplo, cuando el jugador controla a un personaje que está a bordo de un helicóptero, el dispositivo es capaz de replicar la sensación del movimiento de las hélices en su cabeza. La persona que sostiene el mando casi tiene la sensación de estar a bordo. Lo mismo vale, por ejemplo, si se juega a un título de disparos o se está en medio de un bombardeo. La inmersión que ofrece el auricular es notable.

Y todo gracias a la tecnología Hypersense de Razer, que permite que la vibración pase de forma precisa de la izquierda a la derecha de la cabeza variando la intensidad según las señales sonoras que emita el juego. Y que un dispositivo lo consiga no es sencillo. Ni mucho menos.

«La tecnología háptica es un desafío porque se basa en la mecánica del sistema de juego, ya que cada pequeño detalle del dispositivo contribuye a cambiar drásticamente cómo el usuario final sentirá un efecto particular durante las sesiones de juego», explica a ABC Eric Vezzoli, director asociado de la división de tecnología háptica de Razer.

Vezzoli apunta que, para que la experiencia de uso sea óptima, hay que eliminar varios potenciales problemas de la ecuación. «Por ejemplo, si el mando tiene una tolerancia mayor a la esperada en un botón, funcionará perfectamente, pero al agregar una vibración de banda ancha a la mezcla, podría comenzar a crear algunas vibraciones parásitas y pequeños traqueteos que alteran la experiencia de los jugadores», señala el directivo.

«Otro ejemplo de escenario real es el acolchado de los auriculares, si es demasiado suave, filtrará la mayor parte de la señal táctil reduciendo la calidad de la experiencia final, por lo que esto debe equilibrarse con la comodidad del usuario», prosigue.

Razer apuesta porque la tecnología HyperSense cambie, en el corto plazo, las reglas del juego. «El sentido del tacto es un medio de comunicación inexplorado que está disponible para crear experiencias profundas que sumerjan a los jugadores en el mundo digital», remarca Vezzoli.

La empresa sigue invirtiendo para poder jugar un papel protagónico en lo que está por venir. Porque la tecnología háptica no solo tiene posibilidades dentro del negocio de videojuego. Recientemente, científicos de la Universidad Rice presentaron unos guantes que hacen uso de este tipo de vibración para indicar al usuario qué camino debe seguir para llegar a un punto concreto.

La tecnología también promete ser determinante para que las experiencias de realidad virtual sean más inmersivas. Y esto no solo afecta al videojuego, sino a todas las experiencias sociales que, se supone, en el medio plazo serán posibles en el metaverso. Meta, la empresa que pretende darle forma a ese nuevo mundo virtual, que por el momento sigue en los cimientos, lleva años trabajando activamente en el desarrollo de esta tecnología, que ya no es inmadura y que se espera que siga avanzando rápidamente durante los próximos años.