Probamos PlayStation Portal: ¿merece la pena la nueva portátil para poder jugar a tu PS5?

Aunque, sobre el papel, el 'gadget' puede recordar a consolas como la Nintendo Switch o la Steam Deck, las similitudes se quedan, apenas, en el diseño. Porque aunque PlayStation Portal tiene una apariencia que puede recordar a la de estas máquinas, el rango en el que es funcional es bastante más limitado. Básicamente, te permite jugar siempre y cuando el dispositivo esté conectado a internet y la PS5 se encuentre bien cerca. Vamos, que no te lo puedes llevar al parque o al metro. Si quieres utilizarlo, debe ser en tu domicilio.

PS Portal no es una consola. Básicamente, es un mando de PS5 dividido en dos que contiene, en el centro, una gran pantalla LCD de 8 pulgadas. Si lo compras sin tener la sobremesa más actual de Sony, no es más que un pisapapeles. El 'gadget', simplemente, reproduce en 'streaming' la imagen que tu PlayStation 5 proyecta en el televisor al que la tienes conectada. Algo que puedes conseguir con otros dispositivos, incluso en un móvil, gracias a la solución PS Remote. Ahora bien, difícilmente una máquina de terceros va a poder ofrecer una experiencia de juego similar a la de PS Portal.

El dispositivo, en el fondo puede tener mucho sentido; sobre todo si el que lo va a comprar vive acompañado y se ve obligado a compartir la televisión con otros. Si te apetece jugar, pero no tienes una pantalla grande disponible, solo tienes que encender tu PS5, el PS Portal e irte a otra estancia de la casa. Sin problemas. Esto, al final, siempre es mucho más sencillo que coger la consola para conectarla a otra tele y andar liado con los cables, que siempre da muchísima pereza. Además, la configuración de la portátil es bastante simple. En cinco minutos, como mucho, la tienes lista para empezar a jugar.

A diferencia de lo que puede ocurrir con tu 'smartphone' o tablet, al menos siempre y cuando no uses un mando oficial DualSense de PS5, el PS Portal es perfectamente compatible con la tecnología háptica de Sony, que permite que el usuario tenga una experiencia de juego más inmersiva gracias a la vibración y a los gatillos adaptativos.

Nosotros, durante las pruebas, hemos empleado el dispositivo para jugar a varios títulos, entre ellos al 'Marvel's Spider-Man 2', que es uno de los videojuegos que mejor explotan las bondades de la tecnología háptica de PS5. La experiencia ha sido bastante buena. Los controles, adosados a los lados de la pantalla, exactamente igual que en máquinas como Nintendo Switch, dan la talla y son dignos de lo que se espera de un sistema creado por la marca japonesa.

Eso sí, el panel táctil del mando, ubicado en la zona central del DualSense tradicional, se pierde. Para poder emplear su funcionalidades, el usuario debe pulsar las dos esquinas inferiores de la pantalla. Este cambio hace que se pierda algo de comodidad.

Respecto a la pantalla, las sensaciones generales son buenas. Aunque la experiencia de uso tiene sus debes. La imagen que ofrece el dispositivo es notable, pero sufre mucho cuando la conexión a internet no es la adecuada, llegando a dar algún que otro tirón y bajadas en la resolución de la imagen. No es algo muy habitual. Lo normal es que el rendimiento sea el óptimo. Pero si te alejas algo de más del router vas a notar problemas puntuales. Y esto puede ser un problema,

Sobre el sonido no hay quejas. No estamos tampoco ante la octava maravilla, pero la máquina cumple de sobra. Seguramente, la experiencia de audio mejorará bastante con los próximos auriculares compatibles que PlayStation sacará en las próximas semanas. Porque ten en cuenta que no vas a poder utilizar los tuyos de tipo Bluetooth en PS Portal. No son compatibles. Eso sí, la máquina incorpora una entrada de tipo jack, por lo que si todavía tienes algunos cascos con cable por ahí los podrás utilizar.

Como hemos dicho, el PS Portal mantiene intactas las capacidades del mando oficial de PS5. También resulta un dispositivo fácil de usar y cómodo. Pero sigue teniendo varios debes. Para empezar, no es compatible con la reproducción de juegos en modo 'streaming' desde la nube, algo que tendrán que tener en cuenta los usuarios del servicio de suscripción PlayStation Premium. Esto implica que todos los títulos a los que quieras jugar deben estar descargados previamente en la consola. Algo que, por ejemplo, con el catálogo de títulos de la vieja PS3 no es posible, ya que no son retrocompatibles con PS5.

Y si la máquina no transmite los juegos directamente desde la nube, lo mismo pasa con el contenido de otras aplicaciones como Netflix y YouTube.

La autonomía que ofrece la máquina, por otra parte, es correcta sin más. Con la batería al 100% ronda las seis horas, depende del brillo y el sonido. Siempre puedes conectar la máquina a la corriente y seguir jugando, pero no es lo más cómodo del mundo.

PS Portal no es un dispositivo barato. Ni mucho menos. Tiene un precio de 220 euros. Teniendo en cuenta que, en realidad, tan solo te permite seguir jugando a tu PS5 cuando no tienes acceso a la pantalla del televisor en el que tienes conectada la consola, está claro que no se trata de un aparato imprescindible. Dicho esto, ¿merece la pena? Pues depende. Si vives con más personas y lo de poder emplear la televisión grande de la casa está complicado, puede que sí. En cambio, si este no es tu problema, posiblemente no es un 'gadget' que necesites. Ahora bien, cada uno hace con su dinero lo que quiere, que lo suyo cuesta ganarlo. Simplemente puede gustarte tenerlo para poder jugar antes de ir a dormir sin necesidad de quedarte en el salón. Y está bien.

Seguramente, si el dispositivo fuese una suerte de nueva versión de las portátiles de Sony, las viejas PSP o PS Vita, la recomendación sería efusiva. Porque ese sí que sería un dispositivo muy interesante para el usuario, incluso si no llegase con juegos propios y todo lo que permitiese fuese disfrutar de los títulos online disponibles en PS5. Aunque, eso sí, sin necesidad de andar deambulando siempre cerca de la sobremesa para no perder conexión.